Por: Redacción
Del pianista mexicano Mauricio Náder destaca su calidad y calidez interpretativa, el poder de su personalidad artística y la manera de exaltar los sentimientos del público que le escucha; tales cualidades embellecieron el concierto que ofreció la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) este sábado 7 de mayo en el Centro Cultural Ollin Yoliztli (CCOY).
Y es que el reconocido concertista de Bellas Artes (INBA) interpretó el Concierto para piano y orquesta No. 21, del compositor Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791), al ser solista invitado en el quinto programa del Segundo Segmento de Temporada de la OFCM titulado Clasicismo, en honor a esta tendencia musical del siglo XVIII.
Bajo la batuta huésped del serbio Srba Dinic, actual Director Titular de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, Mauricio Náder transmitió la belleza armónica de “la obra que tiene como característica fundamental una abundancia notable de temas y hablan de un periodo creativo particularmente inspirado en la vida de Mozart”, como comenta en las notas al programa el crítico musical Juan Arturo Brennan.
Al tocar cada uno de los tres movimientos que componen la pieza, Allegro maestoso, Andante y Allegro vivace assai, el pianista logró expresar la pasión y entrega que le caracterizan como solista, y sorprendió a los asistentes que llenaron la Sala “Silvestre Revueltas” del CCOY, entre ellos jóvenes del Programa Prepa Sí.
Después de terminado el concierto, Náder platicó sobre la búsqueda como intérprete para plasmar sus cualidades y crear un estilo: “La música no son las notas que la componen; es decir, las notas dan una pauta, pero el resto es intuición. La pasión es que busques cómo frasear una pieza. Para mí es muy importante frasear a Mozart, y no tocar su obra como si fuera un ejercicio mecánico.
“Me gusta buscar el fraseo porque a Mozart le apasionaba la ópera y la canción; entonces, a pesar de ser un concierto para piano, obviamente, éste tiene que sonar cantable y melodioso, debe mantener un carácter visceral de la época, no tanto como el siglo XX, pero en general siempre con ese toque muy amable y elegante”, explicó el músico en entrevista.
Después de recibir los afectuosos aplausos del público junto con el director huésped, Srba Dinic, el artista regaló al emocionado público la interpretación de un pequeño fragmento de La Consolación No. 3 de Franz Liszt, con la cual se despidió del escenario.
A Mozart se unieron otros dos compositores muy relevantes para el clasicismo, completando así un programa único. La agrupación artística de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (SCCDMX) interpretó además la Sinfonía No. 103, Redoble de timbal, de Franz Joseph Haydn (1732-1809), y la Sinfonía No. 2, de Ludwig van Beethoven (1770-1827).
Por una parte, la pieza representante del pensamiento musical de Haydn, de elementos narrativos y descriptivos que formaron parte de la serie de doce sinfonías tituladas bajo el nombre de Londres; por otra, la sinfonía ligera y transparente de textura creada por Beethoven, figura que transita entre el clasicismo y el romanticismo, completaron la noche e hicieron un concierto disfrutable para todos.
Este domingo, la OFCM —una de las agrupaciones musicales de gran nivel más importantes en nuestro país y en América Latina, con trayectoria ininterrumpida de poco más de 37 años—, presentó una segunda función del programa a las 12:00 horas.
Toda la riqueza del programa clásico fue llevado por el maestro Srba Dinic, quien en 2001 fue director de orquesta de la Casa de la Ópera de Berna; en 2004, se convirtió en director titular y de 2007 a 2013 ocupó la posición equivalente a director musical de la Ópera de Berna. Actualmente es director titular de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes.
Además de su gran actividad operística, el músico ha dirigido las Sinfónicas de Berna, de Munich, de Basilea, de Belgrado, de Taipei y de Shanghai, así como la Filarmónica de Württemberg y las Orquestas de Valencia y de Stuttgart, entre otras.
El pianista Mauricio Náder, egresado del Conservatorio Nacional de Música y debutante a los 19 años en el Palacio de Bellas Artes como solista de la Orquesta Sinfónica Nacional, se ha presentado en más de 20 países de América, Europa y Medio Oriente, y ha contribuido a la difusión de la música mexicana en prestigiosos escenarios alrededor del mundo.
Para el siguiente fin de semana, durante los conciertos del sábado 14 y domingo 15 de mayo, Srba Dinic volverá a dirigir a la OFCM en la Sala “Silvestre Revueltas”, donde se interpretarán las obras obertura Egmont, de Ludwig van Beethoven; Cumbres, de José Pablo Moncayo, y la Sinfonía no. 3, de Johannes Brahms.
Los conciertos de la OFCM podrán escucharse el sábado 16 a las 18:00 horas y el domingo 17 de abril a las 12:30 horas en la Sala “Silvestre Revueltas” del Centro Cultural Ollin Yoliztli, que se ubica en Periférico Sur 5141, Colonia Isidro Fabela, en Tlalpan.
La admisión general tiene un costo de 136 pesos, con 50 por ciento de descuento para maestros, estudiantes y personas con credencial del INAPAM vigente.
Para conocer más acerca de los programas de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, visite el sitio de internet http://ofcm.cultura.df.gob.mx/. Siga a la orquesta con el hashtag #ElColorDeLaMúsica
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