Por: Redacción

La población infantil es un sector con mayor probabilidad de ser víctima ataques sexuales, por lo que la Procuraduría General de Justicia capitalina, a través de la Fiscalía Central de Investigación para la Atención de Delitos Sexuales, atiende a niñas y niños que han sido violentados de esta manera, y que de acuerdo con estadísticas, de 2015 a septiembre de 2016 las averiguaciones previas iniciadas por abuso sexual, acoso sexual, estupro y violación representan el 35.82 por ciento del total de la incidencia delictiva que por estos ilícitos se iniciaron en dicho periodo, donde se ven involucrados menores de edad.

Se trata de un tema importante, a la vez que delicado para los pequeños, por lo que la coordinadora interinstitucional de dicha unidad administrativa, Liliana Mijangos Contreras, habló de este tema a través del taller titulado ¿Qué son, cómo podemos evitarlos y cómo podemos denunciarlos? Operación del sistema Bosty y bondades de este instrumento, en las instalaciones de Kidzania, sucursal Cuicuilco.

De esta manera se busca prevenir a los menores sobre su vulnerabilidad frente a ilícitos como incesto, corrupción de personas menores de edad, pornografía y abuso sexual. Cabe destacar que los delitos denunciados más comunes durante el periodo referido fueron por abuso sexual, con un total de mil 281 víctimas, de las cuales mil 123 son niñas; mientras que 390 sufrieron violación, de las cuales 337 son mujeres menores de edad.

La Fiscalía Central de Investigación para la Atención de Delitos Sexuales, durante el lapso de tiempo mencionado, logró que se consignaran 138 averiguaciones previas, de las cuales 98 corresponden al delito de abuso sexual y 40 por violación, mismas que están en tribunales en espera de la sentencia correspondiente.

De acuerdo con la especialista, las actitudes más recurrentes en un menor de edad, víctima de algún delito de esta naturaleza, consisten en que éste se realiza tocamientos continuos en sus áreas genitales, cambios en su estado de ánimo, llora de manera constante, se aísla, suele tener pesadillas y por ende se incrementan sus miedos.

Como una herramienta interactiva, para saber cuando un niño ha sido víctima de uno de los ilícitos mencionados, la procuraduría tiene desde 2012 a Bosty, un marciano virtual, dirigido por personal especializado, como médicos y psicólogos, por medio del cual se realizan tomas de declaración, practican dictámenes y recaban los datos de prueba que sirven de apoyo en las investigaciones.