Por Vicente Flores

Virgilio Andrade presentó su renuncia como titular de la Secretaría de la Función Pública, esto, a unas horas de ser promulgadas las leyes del Sistema Nacional Anticorrupción.

El funcionario argumentó que deja su cargo para que al entrar en vigor las nuevas leyes anticorrupción se nombre a un nuevo titular para que el nuevo sistema “funcione con plenitud institucional” y haya confianza en el nuevo encargado de indagar los casos de corrupción en el gobierno federal.

Las nuevas normas señalan que el titular de la SFP debe ser nombrado por el presidente y ratificado por el Senado.

La SFP no fue el primer puesto en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Al inicio de esta administración, Virgilio Andreade fue nombrado titular de la Comisión Federal de Mejora Regulatoria, en la Secretaría de Economía.

En febrero de 2015, Andrade inició la investigación los casos de presuntos conflictos de intereses: se centró en los contratos entregados a dos empresas: el Grupo Higa y Constructora Urbanizadora Ixtapan; así como la compra de tres casas a las dos contratistas: la de Peña en Ixtapan, la de Luis Videgaray en Malinalco; y la de Angélica Rivera en las Lomas de Chapultepec (conocida como la casa blanca).

Siete meses después, el entonces secretario de la Función Pública concluyó que no existió. “Las relaciones personales no están prohibidas… el conflicto de interés no se materializa con la amistad“, atajó Andrade.