Por: Redacción/
Las ciudades pueden protegerse contra las inundaciones a partir del cuidado de los recursos naturales que se encuentran en las zonas peri-urbanas, aseguró la doctora Gloria Soto Montes de Oca, profesora de la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
En el Foro Problemas metropolitanos: acciones para su atención, con la temática Sustentabilidad en la Ciudad de México, la investigadora presentó los avances del proyecto Incorporación del valor de aseguramiento de los ecosistemas peri-urbanos para aumentar la resilencia frente a inundaciones en ciudades, que encabeza en dicha sede académica y cuenta con el apoyo del fondo del gobierno británico Newton Fund.
La doctora en Ciencias Ambientales por la Universidad de East Anglia, Gran Bretaña, sostuvo que el aseguramiento es un concepto relativamente nuevo que refiere cómo el hábitat protege frente a situaciones de desastre y su estudio busca operacionalizar variables que permiten estimar el valor del medio ambiente de zonas peri-urbanas para aumentar la resiliencia ante el riesgo de inundaciones.
La académica del Departamento de Ciencias Sociales advirtió que “debemos prepararnos frente a los efectos del cambio climático”, ya que se estima que las inundaciones han aumentado en cien por ciento, algo que preocupa, sobre todo donde se concentra gran cantidad de población e infraestructura.
La investigación evalúa “cómo estas zonas peri-urbanas tienen una capacidad mayor o menor de prevenir escurrimientos hacia urbes. El tema de la biodiversidad es otro indicador importante porque está demostrado que ante al cambio climático los ecosistemas más resilientes van a ser los más biodiversos”.
Como parte del proyecto se generó una base de datos a nivel nacional de sitios peri-urbanos, con la colaboración de investigadores del Departamento de Ciencias Sociales de la Unidad Cuajimalpa.
En 384 ciudades “hemos definido las zonas peri-urbanas y a partir de eso las caracterizamos para diferenciarlas, ya sea por clima o tipo de riesgos, y descubrimos que muchas tienen indicadores de marginación preocupantes en términos de que hay una mayor proporción de población sin servicios de agua o drenaje, por lo que si queremos que nos provean de servicios debemos darles la atención necesaria para que se conserven y la gente tenga las condiciones suficientes para vivir de manera decorosa”.
A partir del estudio de casos piloto en el área metropolitana del Valle de México y las ciudades de Villahermosa, Acapulco y Los Cabos también se encontró que muchas de estas zonas peri-urbanas son agrícolas y tienen altos niveles de escurrimiento ante la poca vegetación.
Ahora hay que ver “cómo hacemos para trabajar con esas comunidades desde la política pública y reducir las inundaciones en las zonas urbanas”, reconociendo que hay una dependencia de los habitantes urbanos sobre lo que hacen los de las zonas peri-urbanas.
Este tema cruza varias agendas: la de riesgos, la de cambio climático y la de reforestación, entre otras. “A diferencia de tener proyectos de infraestructura de drenaje en la ciudad, aquí se generan co-beneficios del rescate de servicios ecosistémicos en zonas peri-urbanas”.
La doctora Soto Montes de Oca formó parte de la mesa Cambio Climático en la que también participó el ingeniero Alfredo Vargas Gómez, director regional de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat); el licenciado Jorge Villarreal Padilla, director de Política Climática y Transporte en la organización Iniciativa Climática de México, y la maestra María Zorrilla Ramos, del Centro Transdisciplinar Universitario para la Sustentabilidad (Centrus).
El Foro Problemas metropolitanos: acciones para su atención con la temática Sustentabilidad en la Ciudad de México fue organizado por el Consejo Regional del Área Metropolitana (CRAM) de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior y tuvo lugar en el Auditorio Ignacio Ellacuría de la Universidad Iberoamericana.
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