Por: Redacción
La Universidad Nacional Autónoma de México rindió homenaje, por su 80 aniversario, a Jorge Alberto Manrique, emérito del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) y fundador de museos y escuelas de historia.
En el salón El Generalito del Antiguo Colegio de San Ildefonso, y ante el rector de la UNAM, Enrique Graue, el coordinador de Humanidades de esta casa de estudios, Alberto Vital Díaz, definió a Manrique como uno de los críticos de arte más claros, precisos y perspicaces desde la segunda mitad del siglo XX y hasta nuestros días.
“Es riguroso como todo gran historiador, propositivo como un arquitecto, agudo como un buen prosista, pero con la libertad y el encanto de los buenos poetas”, dijo.
Si con una palabra se tuviera que definir la vida de quien ha recibido reconocimientos como el Premio a la Crítica Joven en la Cultura, Premio al Libro Gratuito de Historia Universal y el Premio Universidad Nacional, ésta sería la de ‘retribución’, pues las distinciones por parte de sus grandes maestros como Edmundo O’Gorman o Daniel Cosío Villegas, las ha devuelto a la sociedad mexicana, de una manera más rica y más grande.
Magdalena Zavala, coordinadora nacional de Artes Visuales del Instituto Nacional de Bellas Artes, resaltó su papel como fundador de instituciones, pues recordó que además de dirigir al INBA, también fue director del Museo de Arte Moderno y director fundador del Museo Nacional de Arte.
“Hacer y consolidar museos no es fácil y Jorge Alberto Manrique lo hizo con gran dignidad y sabiduría”, comentó.
Al historiador también se le debe el rescate de edificios como el Palacio de Lecumberri, el Palacio de Comunicaciones y la defensa de las esculturas de la Alameda. Asimismo, destacó su trabajo como presidente de ICOMOS México (Comité Nacional Mexicano del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios) de la UNESCO.
En su oportunidad, la directora de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) y exalumna de Manrique, Gloria Villegas, señaló que acudir a sus clases era una experiencia extraordinaria, pues en los cursos develaba aspectos significativos para entender el arte y la historia, y convertía las aulas en escenario de encantamiento.
Manrique fue profesor en El Colegio de México, en la Universidad Veracruzana, así como en la carrera y el posgrado de Historia de la FFyL. Sus libros y artículos son fundamentales para las nuevas generaciones de historiadores y críticos del arte.
“Gracias maestro por su obra excepcional, por sus virtudes poéticas en el sentido general del término, es decir, creativas; por ser un ejemplo de autenticidad y por su rigor académico; por lograr, con la articulación de sus saberes, mostrar el caos y convertirlo en cosmos; por ser un espléndido narrador e intérprete de la historia de este país y contribuir, con sus aportaciones, a engrandecerlo”, expresó.
En tanto, la profesora emérita del IIE, Elisa Vargas Lugo, recordó su labor como director de ese Instituto, en donde, con su juventud y carácter innovador, impulsó nuevas líneas de investigación en la música y la danza.
Asimismo, mencionó que en su gestión inició la organización de coloquios de historia del arte, que hasta la fecha siguen reuniendo a investigadores de Europa, Estados Unidos y América Latina.
En la ceremonia, Jorge Alberto Manrique, quien también es miembro de la Academia Mexicana de Historia, la Academia de las Artes y del Comité Internacional de Museos, recordó su paso por la Universidad Nacional como estudiante y luego como investigador, y se dijo orgulloso de ser producto de la educación pública de este país.
“En cada espacio de mi largo recorrido me he encontrado con personas excepcionales, que me han enriquecido y siguen siendo mis amigos hasta el día de hoy”, sostuvo.
En el homenaje también estuvieron la titular de la Coordinación de Difusión Cultural, María Teresa Uriarte; el director del IIE, Renato González Mello, así como investigadores de esa entidad universitaria.
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