Por: Redacción/

Si hubiese un regreso a un confinamiento ante el incremento de casos de coronavirus, éste tendría que ser testimoniado ya no desde la nostalgia de lo íntimo, sino desde la reconfiguración del espacio público, opinó la doctora Alejandra Osorio Olave, directora Académica y Cultural de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), al presentar el Coronalibro, proyecto colectivo, orientado a testificar y reflexionar la pandemia de COVID-19.

La publicación editada por la Casa abierta al tiempo fue presentada en forma digital como parte de la presencia de la UAM en el marco de la 34 Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.

En los primeros días de la emergencia sanitaria hubo una novedad en el encierro, en la convivencia familiar, en las reuniones en línea, pero el confinamiento se ha alargado tanto que ahora “tenemos rutinas en la anormalidad y por lo menos eso he aprendido: somos animales cotidianos que no soportamos bien la morfología de lo extraordinario”, apuntó.

Este texto es un retrato colectivo “de lo que no ha dejado de pasarnos del todo, ya que todos y todas volvimos al cuerpo y a la casa”, espacios que no estuvieron nunca libres de ser instancias políticas, pues son lugares donde se ejerce el poder y la disciplina desde afuera y desde adentro.

La también investigadora de la Unidad Cuajimalpa calificó de gran acierto que la convocatoria a participar en la publicación fuera colectiva, porque el virus “nos tiene mundialmente hermanados, pues las naciones, las clases sociales y los géneros han quedado subsumidos a un microorganismo con un envoltorio proteico que flota en el aire en micropartículas y del que debemos protegernos para salvar la vida”. La crisis sanitaria es “un presente continuo que no nos deja de ocurrir”.

Este es otro momento del confinamiento que lleva a la reflexión sobre lo que pasaba en esos espacios íntimos, que si para algunos eran nostálgicos para muchos otros fueron muy violentos; en ese sentido la vuelta al confinamiento desde esa nostalgia es algo casi imposible y ahora sería desde lo público, viendo de qué manera se vuelve a configurar la calle.

“Hay una vía que se ha reconfigurado a partir, por ejemplo, de los anuncios caseros que hace la gente como ‘no pase sin cubrebocas’”; en la fonda, las cruces en el piso de los establecimientos para indicar la distancia entre una persona y otra.

El maestro Francisco Mata Rosas, coordinador General de Difusión de la UAM y compilador de los trabajos que conforman el Coronalibro sostuvo que la intención de la publicación “es mostrar a través de un coro de voces y miradas cómo estamos llevando el confinamiento, redescubrir nuestras propias casas, cómo entra la luz por la ventana, cómo se mueven las sombras a lo largo del día y los objetos que siempre forman parte de nuestra historia y son como cicatrices que nos recuerdan a una persona, un momento o una sensación”.

Después de nueve meses “pareciera que estamos de regreso a los primeros momentos de la pandemia”, pero es un retorno distinto porque en ese momento el mundo íntimo recobró una fuerza, “prometimos hacer yoga, leer libros y aprender otro idioma”, y la mayoría de esas cosas no sucedieron”; ahora, a pesar de que los números son alarmantes “y de que algunos veíamos como lejano el COVID, éste se ha acercado y llegado a lo más nuclear de las familias, por ello es importante diferenciar en dos etapas esta emergencia sanitaria en la que todavía estamos”.

Lo reflejado en el texto ya sucedió e independientemente de la vigencia que pueda volver a tener y del carácter nostálgico de sus páginas, “todos entendemos que estamos en otro periodo que también puede ser testimoniado, reflexionado y documentado, por lo que se considera hacer otro libro”.

La doctora Osorio Olave comentó al respecto que sería un documento muy distinto que expresaría, por ejemplo “esta vida pública con mascarillas mal puestas o el uso de aquellas con filtro que ahora se sabe que en realidad propagan el virus, entre otras imágenes de esta reconfiguración de lo público de la pandemia.

Debido a las restricciones impuestas por la enfermedad que provoca el virus SARS-CoV-2, el Coronalibro no ha podido ser distribuido en librerías, sin embargo, puede adquirirse en www.casadelibrosabiertos.uam.mx página recién creada por la Dirección de Publicaciones y Promoción Editorial de la UAM.

Las transmisiones se extenderán más allá de la Feria y se llevarán cabo de manera digital hasta el 17 de diciembre a través de https://www.facebook.com/librosuam