Por: Redacción/

UNICEF ha denunciado que las condiciones en el campamento de Rukban, en Siria, siguen deteriorándose a un ritmo alarmante. Desde comienzos de año, un niño ha muerto allí cada cinco días.

Al menos 12 niños han muerto en 2019 en el campo de desplazados, donde 40.000 sirios viven en “condiciones desesperadas” en la frontera con Jordania.

Según UNICEF, de los 12 menores muertos “cinco eran recién nacidos que no cumplieron su primera semana de vida”

El director regional de la agencia ha recordado que hace un mes alertaron de que “las gélidas temperaturas y la falta de atención médica” ponían en peligro las vidas de los niños de Rukban, pero desde entonces “otros ocho niños menores de cinco años han muerto”.

“¿Cómo podemos no actuar cuando recién nacidos y niños pequeños están muriendo de desnutrición, sepsis, enfermedades respiratorias y otras cuestiones fácilmente prevenibles con acceso a atención sanitaria adecuada y condiciones de vida básicas?”, se ha preguntado el responsable de UNICEF.