Por: Redacción/

La diputada Dulce María Sauri Riancho (PRI) aseveró que el proyecto del Tren Maya no es rentable y no tiene un estudio de factibilidad económica, ni un plan de financiamiento que indique de dónde saldrán los fondos para su construcción y operación.

Señaló que el Ejecutivo federal no cumplió con el marco regulatorio en la consulta popular que se efectuó el 15 de diciembre de 2019: “a la gente le preguntaron sobre sus necesidades básicas, agua potable, energía eléctrica, becas para los niños, ampliación de un camino y le prometieron resolver todos sus problemas, así que lo que menos importó es el Tren Maya”, sostuvo la diputada por medio de un comunicado.

Recordó que los megaproyectos de la actual administración –la Refinería de Dos Bocas, el aeropuerto de Santa Lucía y el Tren Maya– se han convertido en una aspiradora de recursos públicos y una motivación para crear impuestos.

Apuntó que a largo plazo el gobierno federal no contará con los fondos necesarios para construir y operar un ferrocarril de las características de ese megaproyecto.

Explicó que hay interés de la iniciativa privada para construir mil 500 kilómetros de la obra. Por ejemplo, en el tramo de Valladolid, Mérida, Palenque y Coatzacoalcos; sin embargo, el proyecto requiere de más de 150 mil millones de pesos, casi cuatro veces el presupuesto de Yucatán para 2020.

La obra no demuestra viabilidad económica y solo genera estrechez presupuestal a los gobiernos estatales y municipales de casi toda la República, concluyó.