Por: Redacción

El Acuerdo de Asociación Transpacífico es una revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y con o sin Estados Unidos México seguirá una trayectoria ya trazada, haciendo los ajustes necesarios para darle viabilidad al TPP, aseguró el senador Manuel Cavazos Lerma.

El senador integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores Asia-Pacífico dijo que el TPP es un tratado de última generación, que nos permitirá diversificar el comercio, aumentar el espacio de mercado y dar tratamiento preferencial a las pequeñas y medianas empresas, que son una fuente importante de producción, empleo y desarrollo.

Con todas estas ventajas se configura la convicción de ratificar este tratado de última generación, que tiene la virtud de coexistir con todos los acuerdos, reglas y compromisos que México tiene con la Organización Mundial de Comercio (OMC), “de manera que paralelamente con el TPP están negociándose acuerdos y tratados con otros países”.

Refirió que a pesar de la postura que ha asumido Estados Unidos en torno al TPP, México no debe enredarse en el nerviosismo del momento. “Mientras en las campañas resaltan las divergencias, en el gobierno se buscan las convergencias, y yo creo que el esfuerzo que han hechos los negociadores de Estados Unidos, todo ese talento no puede ser menospreciado, desdeñado o marginado, porque cuenta mucho”.

Durante la sexta jornada de las Audiencias Públicas para el análisis del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), se analizaron los temas: Empresas de propiedad del Estado y monopolios designados; Política de Competencia; y Proveeduría Pública.

Fernando Zendejas, jefe de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Economía, detalló que en el Acuerdo quedaron reservadas como actividades estratégicas la exploración y extracción de hidrocarburos por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex), a través de asignaciones directas que representan una ventaja adicional respecto a otras empresas, que tienen que participar en licitaciones.

El director general de Reglas de Comercio Internacional de la Secretaría de Economía, Orlando Pérez Gárate, dijo que se asegura un marco de competencia justa en la región, se promueve la eficiencia económica y el bienestar del consumidor.

Se establece la obligación de que los miembros del TPP adopten o mantengan leyes de competencia que prohíban prácticas anticompetitivas, aplicar leyes nacionales en el sector a todas las actividades y mantener autoridades responsables de la materia, añadió.

Alejandro Faya Rodríguez, jefe de la Unidad de Planeación, Vinculación y Asuntos Internacionales de la Comisión Federal de Competencia Económica, resaltó el beneficio de la entrada de seis socios comerciales –Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelandia, Singapur y Vietnam– los cuales representan nuevas alternativas de abasto para México.

Desde la perspectiva de la competencia es benéfico ampliar el acceso a los mercados, aumentar y diversificar las opciones de abasto, y fomentar la rivalidad competitiva entre las empresas, independientemente de su nacionalidad u origen, agregó.

El académico Ricardo Ramírez exhortó al Senado a revisar “con cuidado” el Acuerdo en lo que refiere a las empresas productivas del Estado, ya que “es único en su tipo”, pues es la primera vez que se regulan empresas estatales y se le imponen dos tipos de disciplinas sobre discriminación y actuación, y subsidios.

El capítulo “es sumamente ambicioso en cuanto a las disciplinas que aplica”, por lo que sugirió revisar qué empresas de propiedad estatal estarían cubiertas por estas obligaciones, dijo.

En representación de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero), Jesús Flores Ayala señaló que se debe analizar el impacto sobre el comercio de bienes y servicios, inversión e implicaciones a las empresas de Estado, pues las disposiciones superan lo que está en la legislación internacional y en el Tratado de Libre Comercio.

En su opinión, el espíritu del capítulo en materia de competencia que se encuentra en el TPP, busca que las empresas del Estado se comporten de forma similar a la de una empresa privada, pero si no está bien manejada, podría traer pérdidas.

Edgar Ubbelohde Rosaldo, vicepresidente del Consejo Directivo del Instituto Mexicano de Normalización y Certificación, dijo que para el sector privado el Acuerdo “es muy satisfactorio”, ya que se agilizan procedimientos y hay acceso a nuevos países socios.

Si se ofrecía una apertura menor sería inútil para México, porque los tratados anteriores “nos obligaban a esta apertura. En lo general se mantuvo el equilibrio que se tenía por más de dos décadas”, agregó.