Por: Jesús González
Con la finalidad de atender a la población joven para que permanezcan en el sistema educativo del país, senadores del PRI y el PVEM propusieron una iniciativa para reformar y adicionar diversas disposiciones de la Ley General de Educación.
Esto con la finalidad de detener el crecimiento de las personas que no estudian y tampoco trabajan, pues en nuestro país en los últimos años este problema ha crecido, tan solo en este año el número de personas que no aportan económicamente y tampoco estudian se ha elevado a un 25% a comparación del año 2012 en el que solamente era un 22% de la población.
Por esto el proyecto propone otorgar a jóvenes de 15 a 29 años facilidad para que les sean otorgadas becas de instituciones de educación, tanto del Estado como particulares.
Otro propósito es evitar que se desaproveche la preparación de los jóvenes que por razones económicas se ven en la necesidad de dejar a un lado sus estudios a nivel media superior y educación superior.
Los senadores del PRI fueron insistentes en que el país enfrenta un grave problema en relación educación-empleo, situación que debe atenderse fortaleciendo al sistema educativo mexicano, pues la calidad de los servicios ha ido en picada, además de que la orientación de los gastos no es adecuada, los programas de estudio no son pertinentes y no existe la vinculación necesaria entre el proceso educativo y las actividades productivas en el país.
La importancia de aumentar los estímulos para que los jóvenes permanezcan en las instituciones de educación radica en que 85 por ciento del presupuesto para educación está destinado al pago de la nómina magisterial, mientras que tres por ciento se utiliza para cubrir los gastos de sanitarios, ventanas, pisos, techos o pintura que requieran las escuelas.
Para concluir, esta iniciativa subraya que de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el proveer una educación de calidad podría impulsar el crecimiento económico anual a un dos por ciento a los países de bajos ingresos y en situación de vulnerabilidad.
El proyecto para reformar la Ley General de la Educación fue turnado a las comisiones unidas de Educación y Estudios Legislativos para su evaluación y dictaminación.
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