Por: Redacción/

La Secretaría de Desarrollo, Agrario Territorial y Urbano con el apoyo del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, (BANSEFI), así como autoridades estatales y municipales, realizan a través de tarjetas de débito la entrega de apoyos a quienes se registraron en el censo de viviendas afectadas por los sismos de septiembre pasado en los estados de Chiapas y Oaxaca.

Brigadas conformadas por los diversos niveles de gobierno, coordinadas por la SEDATU, recorren las comunidades de los municipios afectados para entregar casa por casa las tarjetas a quienes se les dictaminó alguna afectación en su vivienda.

Dichas tarjetas se otorgan a las familias afectadas a contra entrega de la firma de una carta compromiso para que asuman que los recursos depositados en la misma se utilicen únicamente para la autoconstrucción de su vivienda, la cual contará con la asistencia técnica de la Secretaría, así como de empresas y agencias de construcción, bajo las normas y reglamentos de construcción que observan la condición sísmica de esta zona.

El Gobierno de la República determinó apoyar con hasta 120 mil pesos, en 4 parcialidades, a los mexicanos que perdieron totalmente su vivienda; de este monto, 80 por ciento se destinará para la compra de materiales y 20 por ciento para el pago de mano de obra o autoempleo, y para quienes tuvieron daños parciales el monto del apoyo será de 15 mil pesos.

Los apoyos entregados a los afectados se podrán utilizar de manera inmediata en los comercios dedicados a la venta de materiales de construcción, en donde habrá un kit de 58 materiales básicos para iniciar la reconstrucción de cada una de las viviendas.

El Gobierno de la República, a través de la SEDATU, elaboró una guía de reconstrucción en diversas lenguas indígenas que sirva de apoyo a las familias en la autoconstrucción de su vivienda.

La entrega de apoyos será gradual conforme se recorran las comunidades, y es muy importante que integrantes de la sociedad civil acompañen este proceso con la finalidad de darle un sentido de transparencia y claridad en el manejo de los recursos públicos que se utilizan en apoyo de quienes más lo necesitan.