Por: Redacción 

La Procuraduría General de Justicia capitalina, logró esclarecer la muerte de una mujer de 54 años de edad, quien fue hallada sin vida el pasado 11 de septiembre, en la colonia La Candelaria Ticomán, delegación Gustavo A. Madero, luego de que su hijo de 34 años, quien ya fue detenido, la asesinara.

Con los elementos de prueba suficientes, integrados en la carpeta de investigación por el delito de feminicidio agravado, la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio solicitó el 30 de noviembre del presente año una orden de aprehensión contra el imputado, misma que fue obsequiada por un Juez de Control y cumplimentada por elementos de la Policía de Investigación (PDI) el pasado 01 de diciembre.

En la audiencia inicial, el agente del Ministerio Público realizó la imputación y el juzgador lo vinculó a proceso por el ilícito mencionado, y le impuso como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa, por lo que fue ingresado al Reclusorio Preventivo Varonil Norte.

En seguimiento a las indagatorias, agentes investigadores establecieron que el indiciado cuenta con dos ingresos al reclusorio, por los ilícitos de portación de arma de fuego y robo calificado, así como una investigación por violencia familiar.

Con las entrevistas realizadas por elementos de la Policía de Investigación, adscritos la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio, a personas que conocían a la agraviada y testigos de los hechos, se pudo establecer que la occisa fue presuntamente asesinada por su hijo, toda vez que la noche del 09 de septiembre, alrededor de las 20:00 horas, los escucharon discutir dentro del inmueble donde habitaban, percatándose además de que hubo golpes, pues los oyeron.

Antes de la discusión, los testigos refirieron que afuera de la habitación donde habitaba la agraviada con su hijo, éste último se encontraba ingiriendo bebidas alcohólicas e inhalando solvente.

Posteriormente, el imputado fue visto cuando arrastraba un bulto, envuelto en una sábana color blanco, mismo que colocó en una rampa con barandal en lo que antes era una escalera del inmueble donde habitan, en la calle Miravalle, también conocida como Paso del Norte, colonia La Candelaria Ticomán, delegación Gustavo A. Madero.

Asimismo, vieron que el indiciado quitó del bulto la sábana que lo tapaba y la enrolló, quedando cubierto en bolsas de plástico color negro, y se retiró del lugar.

Por la mañana, el probable agresor fue visto cuando lavaba los pisos de su cuarto, así como la ropa que llevaba puesta durante la madrugada que sacó el cadáver.

La hija de la víctima fue quien se percató de la ausencia de la agraviada, y al empezar a investigar sobre su paradero, el imputado le comenta que no sabía nada de su mamá y que ésta había salido un día antes sin decir a dónde iba.

Alrededor de las 15:30 horas, el cadáver fue localizado por una vecina, envuelto en bolsas de plástico de color negro, en el sitio donde lo abandonó el implicado, y de forma inmediata, aviso a las hermanas de ésta, quienes habitan en el mismo predio, y que llegaron para identificarla.

El representante social dio intervención a elementos de la Policía de Investigación (PDI), así como a peritos en criminalística, fotografía, genética y química forense, quienes realizaron las primeras indagatorias.

Derivado de los estudios practicados durante la necropsia de ley, se determinó que la ofendida había muerto asfixiada por estrangulamiento.

Cabe señalar que el día del hallazgo, el imputado presentaba lesiones en la mejilla derecha y en la parte externa del cuello, mismas que, durante su primera declaración de los hechos, manifestó que éstas le habían sido ocasionadas en una riña con otro individuo.