Por: Redacción

Por su destacada trayectoria en la vida del México contemporáneo, la UNAM confirió la Cátedra Maestro Ricardo Torres Gaitán a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.

La Cátedra busca fomentar y profundizar la investigación económica, especialmente en lo relativo al desarrollo económico, por lo que se entrega anualmente a un académico o funcionario de prestigio.

En esta ocasión, el Comité Técnico decidió entregarla de forma unánime y honorífica a Cárdenas Solórzano.

Antes que él, ha sido ocupada por Alicia Bárcena Ibarra, actual secretaría ejecutiva de la CEPAL; Claudio Katz, de la Universidad de Buenos Aires, Argentina; Arun Kumar, de la Universidad Jawaharlal Nehru, Nueva Delhi, India; y José Antonio Ocampo, de la Universidad de Columbia.

En el Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM, ante académicos, exdirectores y alumnos de la entidad universitaria, Cárdenas Solórzano recibió la Cátedra y ofreció la charla “Propuestas de política económica, hacia un nuevo modelo de desarrollo en México”.

Habló de la necesidad de hacer un cambio en el modelo actual, que en casi 40 años no ha mostrado ser eficiente. Sus resultados son visibles y medibles, manifestó, pues un 55 por ciento de la población padece pobreza patrimonial, 20 por ciento de ella está en pobreza alimentaria, además de que la desigualdad social es evidente.

“Hay inestabilidad en las finanzas públicas, los precios y el tipo de cambio; a todo ello hay que agregar la violencia y la inseguridad de la gente en su vida diaria, una profunda corrupción dentro y fuera de las esferas oficiales, impunidad y delincuencia organizada creciente en el territorio nacional”, enumeró.

Ante tal situación, estimó indispensable un cambio radical en la materia; para ello se requiere que el Estado recupere la conducción económica, la planeación y promoción del desarrollo, impulsando en paralelo la universalización de los ciclos obligatorios de la educación, la elevación de la calidad en el conjunto del sistema educativo, la promoción y el fortalecimiento de la educación superior, la investigación científica y el desarrollo tecnológico.

Esto debe ser visto como un elemento de justicia social fundamental para el desenvolvimiento económico y una premisa para lograr una política económica que permita el crecimiento a largo plazo, la creación del empleo formal y la distribución equitativa del ingreso.

Acompañado de Leonardo Lomelí, secretario General; Alberto Vital, coordinador de Humanidades; y Verónica Villarespe, directora del IIEc, Cárdenas expuso que “llevar a la práctica un proyecto de desarrollo como el que se plantea, requiere empezar por librar un combate a fondo contra la corrupción, la impunidad y la delincuencia, así como empezar a instrumentar políticas de crecimiento económico, de fomento al empleo formal, de mejoramiento al ingreso familiar y de impulso a la industrialización”.

Integración con el Sur

En otro orden de ideas, Cárdenas Solórzano señaló que el país no puede desentenderse de la agresividad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ni ignorar que millones de mexicanos están amenazados con la deportación.

Si bien universidades mexicanas ya se preparan para recibir a estudiantes que sean deportados, y revalidar sus estudios, aún es necesario buscar el apoyo jurídico para las familias que podrían ser separadas por la política del mandatario estadounidense.

Es una razón más para acelerar un cambio en el que se voltee la vista hacia el Sur para impulsar la integración política y económica, y hacia otros continentes, además de buscar la diversificación de nuestros intercambios, enfatizó en el auditorio Maestro Ricardo Torres Gaitán.

Asimismo, recordó que economistas de la UNAM han propuesto responder a la nueva política estadounidense con aranceles a los productos norteamericanos, como ya se hizo en 2009, pero estimó que la política será insuficiente.

Por ello, instó a buscar el apoyo de organizaciones, legisladores y ciudadanos norteamericanos, así como de correspondientes nacionales, para defender jurídicamente a quienes están en riesgo de ser deportados.