Por: Redacción/

Ante la desigualdad y violencia de género en la que viven las mujeres de las 68 comunidades indígenas y de alta marginalidad en la Sierra Norte de Puebla, el Gobierno estatal debe crear alternativas para promocionar sus actividades productivas y culturales, con la finalidad de que reciban un pago por ello, exigió la diputada Blandina Ramos Ramírez.

En el marco del Día Internacional del Trabajo, la legisladora federal de Morena subrayó que los pueblos originarios conservan en sus actividades miles de años de tradición, activo que favorecería la comercialización de sus productos y en el que las mujeres juegan un papel clave.

“Las mujeres indígenas sufren un doble agravio: ser pobres y ser violentadas. Por eso, como diputada federal, busco alternativas para terminar con ese círculo vicioso. Propongo que el Gobierno de Puebla promueva sus actividades culturales y de trabajo”, indicó.

En entrevista, dio a conocer que el pasado 5 de abril presentó un Punto de Acuerdo para que la Cámara de Diputados exhorte al Gobernador de Puebla, José Antonio Gali Fayad, a fomentar las actividades que realizan las indígenas de la entidad, a través de programas de difusión cultural.

Al respecto, consideró urgente la intervención efectiva del sector público porque de las más de tres mil 250 localidades indígenas que existen en México, 185 se encuentran en Puebla y de éstas, 68 se localizan en la Sierra Norte poblana, donde sus habitantes padecen alta y muy alta marginalidad.

Recalcó que la problemática laboral en esas comunidades es peor que la media nacional, ya que siete de cada diez indígenas ganan un salario mínimo mensual –alrededor de dos mil 200 pesos– y eso no ocurre en la Sierra Norte, de acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).

“La situación es inaceptable. El Gobierno presume de los beneficios del comercio internacional, de los tratados internacionales, de la inversión extranjera, las carreteras, hasta del nuevo aeropuerto, pero los indígena están aislados de todo eso”, reclamó.

Blandina Ramos criticó además que el Estado –a través de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas– aplicará en obras y servicios 150 millones de pesos durante 2018 en Puebla.

“Sin embargo, dichos recursos se invertirán al mantenimiento y atención de albergues indígenas y siete comedores comunitarios. Es decir, en tareas estrictamente asistencialistas, cuando urge impulsar las actividades productivas de la población indígena, y en particular de las mujeres”, señaló la también integrante de la Comisión de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial.