Por: Redacción/

En la década de 1980 comenzó en México el retraimiento de las funciones del Estado en materia de cultura y el debilitamiento en términos financieros hacia los programas y planes estratégicos, sostuvo la gestora Ishtar Cardona Pérez durante las Jornadas de diálogo. Programa sectorial de cultura,Presupuesto y planeación para el desarrollo realizadas los días 23 y 24 de julio en la Casa Rafael Galván de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

La profesora del Colegio de Estudios Latinoamericanos de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México afirmó que tal tendencia incluyó la introducción de capital privado y el involucramiento de empresas en planes y programas que otrora habían sido gestionados por instituciones oficiales.

En ese contexto resulta imperioso un análisis conceptual que tome en cuenta el marco internacional en términos políticos y estructurales para perfilar estrategias de intervención acordes con las necesidades, ya que en la mayoría de los casos se ha partido de posiciones personales de ciertos grupos y del gobierno en turno.

El doctor Eduardo Nivón Bolán, profesor-investigador del Departamento de Antropología de la Unidad Iztapalapa de la UAM, señaló que con la llegada del neoliberalismo hubo un cambio de paradigma respecto de la cultura y su valor social y, a pesar de las críticas, los decretos de creación de instituciones como el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) plantearon muchos objetivos que en su momento fueron necesarios y rejuvenecedores para el sector.

Un caso diferente fue la creación de la Secretaría de Cultura, en la que existió un vacío en cuanto a diversidad, pluralismo y derechos culturales, hasta que tuvo lugar la discusión sobre la Ley General de Cultura, apuntó el antrópologo en la mesa Del neoliberalismo a la 4T: La planeación en el desarrollo cultural, moderada por Eduardo Cruz Vázquez, coordinador del Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura (GRECU), en el que participan académicos y egresados de la UAM.

La periodista María Elena Matadamas Jiménez expuso que el fortalecimiento de la institucionalidad no se ha traducido en políticas y programas en la materia que incidan en términos reales, ya que las diferentes administraciones dejaron temas pendientes, incluidos la vinculación entre el sector educativo y cultural, el impulso y protección a las industrias culturales, así como la formación de públicos, entre otros asuntos.

Además han predominado los programas paternalistas, asistencialistas y centralistas, los cuales son muy vistosos pues buscan llenar estadísticas, lejos de tener un verdadero impacto social, advirtió la directora del Observatorio de Comunicación, Cultura y Artes OCCA/Tercer Vía S.C.

Los especialistas concluyeron que frente a la nueva administración es necesario hacer una revisión crítica que involucre las voces de todos los actores de la acción cultural y no solamente la de los funcionarios.

Esto debe plantear los temas de la descentralización de los programas y acciones, la creación de planes sectoriales y la promoción de derechos, entre ellos la seguridad social para artistas y creadores, con miras a la verdadera democratización de la cultura.

Las jornadas –encaminadas a debatir sobre los asuntos culturales en los niveles de desarrollo y financiero– continuarán hoy con las mesas de discusión: La planeación nacional, temas y agentes sectoriales y El sector cultural: economía, empresas e industrias.