Por: Redacción

El perredista Alejandro Ojeda Anguiano, vicepresidente de la Cámara de Diputados, destacó que en la Reforma Educativa “no todo está mal, se salvan unas partes, pero debe derogarse y modificarse en lo que no se coincide para llegar a buen puerto”. Se comprometió a buscar adecuaciones a dicho marco jurídico.

En una reunión de trabajo con presidentes municipales de la región Mixteca de Oaxaca, encabezados por Alejandro Aparicio Santiago, munícipe de Tlaxiaco y diputado electo por el Distrito VIII en aquella entidad, así como padres de familia, el legislador señaló que el gobierno federal tiene que “abrir el diálogo para buscar la coincidencia y no una cerrazón”.

“No decimos que está mal el 90 por ciento de los artículos, pero diez son los que afectan y es donde queremos que se modifiquen”, como la ley de Evaluación de la Educación, ya que no se puede valorar con los mismos criterios al magisterio de Oaxaca, donde existen ocho regiones con una cosmovisión diferente que al de otras entidades. Esa pluriculturalidad tiene que reflejarse en el marco legal, ya que hasta el clima cambia la forma de ver y comportarse, dijo.

Se requiere analizar la Ley General del Servicio Profesional Docente, porque “estamos de acuerdo en que haya evaluación y capacitación”. La dignificación de la carrera magisterial no es cualquier cosa y es de gran importancia, tiene la responsabilidad de enseñar y debe contar con todas las herramientas pedagógicas para lograrlo, pero “tampoco deben seguirse cerrando las normales, que son un pilar educativo”.

Ojeda Anguiano afirmó que la Cámara de Diputados abre sus puertas para ser puente y escuchar las necesidades de los presidentes municipales y de los padres de familia de Oaxaca, a fin de trabajar en conjunto en busca de una solución al conflicto magisterial que se vive en torno a la Reforma Educativa y hacer llegar las demandas a la Secretaría de Gobernación.

Asimismo, buscar diferentes mecanismos e interactuar con la Cámara de Senadores para que, una vez que se logre un conseso en los diversos puntos de la Reforma Educativa, ver la posibilidad de generar un periodo extraordinario, para atender esta sensible demanda, no sólo en algunos estados sino en la Ciudad de México y en todo el país.

El edil electo de Tlaxiaco, Óscar Ramírez Bolaños, entregó al vicepresidente Ojeda Anguiano el acta de acuerdos de 33 municipios mixtecos oaxaqueños, en donde fijan su postura en torno a la Reforma Educativa y a los hechos registrados el 19 de junio en Nochixtlán.

De los 13 acuerdos, resaltan exigir la anulación definitiva de la Reforma Educativa por las afectaciones que implica; solicitar a los diputados federales y locales elaboren modificaciones legales a dicha reforma; constituir un Consejo Estatal de Presidentes Municipales de Oaxaca, y crear un frente de abogados democráticos.

El presidente municipal de Tlaxiaco, Alejandro Aparicio Santiago aseguró que no existe desabasto de alimentos básicos ni de gasolina en la zona por los bloqueos magisteriales; refirió las inquietudes e inconformidad social que prevalecen respecto a la Reforma Educativa y su impacto en la vida cotidiana. Sostuvo que la ciudadanía está indignada por los hechos sangrientos en Nochixtlán.

Llamó a la conciencia de las autoridades estatales y federales. Aclaró que el tema no es del magisterio o de la Mixteca, sino de la comunidad; “estamos a tiempo de adecuar la Reforma Educativa a las necesidades reales del magisterio. Es un movimiento social que quiere el beneficio general”.

Los representantes municipales llamaron a los grupos parlamentarios de San Lázaro a analizar la Reforma Educativa con el propósito de modificarla, y pidieron a los diputados sensibilizar al gobierno federal para adecuarla.

Condenaron el uso de la fuerza para reprimir a la sociedad oaxaqueña; rechazaron que “se les etiquete como guerrilleros”, ya que eso es una gran mentira que desinforma a la población; aseguraron que no es un movimiento de la CNTE, sino de la comunidad rural que exige respeto a su derecho a una educación pública de calidad y a la libertad de expresión.