Por: Redacción/

El principal inhibidor de la inversión en México y que trae como consecuencia el crecimiento de la desconfianza hacia las instituciones públicas, es la corrupción, sostuvo el senador Ricardo Monreal, al recordar que el Proyecto de Nación 2018-2024 del Presidente electo señala que el Estado debe convertirse en promotor del desarrollo político, económico y social del país.

Ante este panorama, dijo que es necesario reconocer a quienes con tenacidad y empeño invierten, generan empleos, obtienen ganancias lícitas y se comprometen con el desarrollo del país.

Para ello, anunció que en el transcurso de la semana presentará una iniciativa para crear la Ley de Fomento a la Confianza Ciudadana, cuyo objetivo es establecer las bases de un nuevo esquema en el cobro de impuestos, basado en la confianza y en las facilidades administrativas.

Hizo hincapié en que se necesita eliminar la corrupción, problema, que según el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), representa 10 por ciento del Producto Interno Bruto en México.

Es indispensable, subrayó, fundar las bases y los instrumentos legales para que los ciudadanos puedan recibir beneficios y facilidades administrativas, a fin de ejercer de mejor manera sus actividades económicas con menos trámites ante las autoridades.

Ricardo Monreal planteó la creación de un Órgano que tendrá como función aprobar las acciones y programas sectoriales -de acuerdo al ámbito de competencia de cada Secretaría- para la implementación de beneficios y facilidades administrativas.

Para poder acceder a ese tipo de beneficios, el ciudadano deberá inscribirse voluntariamente al Padrón Único de Fomento a la Confianza. Su registro no tendrá costo alguno y será considerado como un acto de buena fe, pues dará entender al Estado que ha cumplido con todas sus obligaciones fiscales y regulatorias.

A cambio, explicó, podrá recibir los beneficios y facilidades que establezcan los programas sectoriales de las dependencias federales.

Otra de las medidas que contempla la iniciativa es suspender la vigilancia y fiscalización a establecimientos comerciales, mercantiles y de servicio que realizan los inspectores del Gobierno Federal.

Los dueños de estos establecimientos sólo tendrán que inscribirse en el Padrón para manifestar, bajo protesta de decir la verdad, que se comprometen a cumplir las leyes a que están obligados para funcionar sin ser molestados o amonestados, como hasta ahora lo establecen los reglamentos de la materia.

Dicho registro se manejará bajo las reglas de protección de datos personales y estará bajo la responsabilidad de la Secretaría de Economía.

Se sugiere que “cada determinado tiempo”, la Secretaría, el sector privado y académico, lleven a cabo un sorteo o insaculación para seleccionar al uno por ciento de los empadronados o inscritos que serán supervisados para verificar que son ciudadanos responsables y cumplen con la legalidad vigente de la materia.

Los dueños de los establecimientos que pasen la prueba y estén en orden, recibirán un reconocimiento de la Presidencia de la República.

Se precisa que se sancionará, de conformidad con la ley, a los ciudadanos incumplidos y se les retirará la confianza, haciéndose acreedores, en automático, a ser supervisados cada vez que haya un proceso de revisión.

El senador de Morena aseguró que estas acciones propiciarán un entorno de confianza entre las personas físicas y morales y la Administración Pública Federal

Además, se crean incentivos para estar dentro de la ley y se desincentivan los motivos para continuar con esquemas de corrupción, ya que, con el Padrón se buscar pasar a un mecanismo de revisión por insaculación.

“El principio de confianza al ciudadano será prioritario en el nuevo Gobierno, se instaurará un nuevo esquema de cobro de impuestos basado en tenerle confianza al ciudadano, en lugar de tratarlo como a un delincuente. Es decir, pasar de la fiscalización al principio de la buena fe”, puntualizó.