Por. Redacción/

En México se presentará un brote comunitario del COVID-19, porque es la historia de cualquier nuevo agente, en este caso del coronavirus SARS CoV2, ya que es la naturaleza del virus, no obstante las medidas preventivas implementadas por el sector salud, sostuvo el doctor Francisco Oliva Sánchez.

El profesor de la Licenciatura en Medicina de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) señaló que es un virus que llegó para quedarse y una vez que pase la pandemia formará parte “de las opciones para que nos dé síndrome catarral común, tal como pasó con la influenza H1N1 en 2009”, que forma parte de las gripes estacionales.

En este momento debe cuidarse a los grupos de riesgo: adultos mayores, personas con algún padecimiento crónico, diabetes, hipertensión y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, a quienes se recomienda no salir de casa si no es necesario.

Además deben evitar el contacto con la gente y si presentaran algún síndrome o cuestión como el resfriado acudir al médico para que valore si realmente cumplen con los criterios para practicarse la prueba de coronavirus, ya que hasta ahora no hay medicamentos que contrarresten los efectos del COVID-19, incluso ninguno de los antirretrovirales utilizados en el tratamiento de pacientes con VIH ha probado una eficiencia real.

Tampoco se puede hablar de una vacuna y sólo se sabe de varios ensayos clínicos en China, Corea del Sur, Gran Bretaña, Estados Unidos y otros países, toda vez que estos procedimientos implican varias fases, que por más rápido que se pretendan desarrollar son lentas.

“Escuché un reporte de que en Estados Unidos fue aprobada la primera vacuna en un sujeto humano, una mujer, en el Instituto de Alergias, pero los ensayos tienen que cumplir diferentes etapas, al menos tres, y la cuarta es cuando se libera o se puede probar en población abierta”.

Después de la cuarentena, México tendrá varios escenarios que comprenderán el reinicio de muchas actividades económicas, educativas y sociales desde cero, y una de las principales sería aprender si lo que se está haciendo es adecuado o no para tomar mejores decisiones futuras, ya que “no será la primera vez en la historia que tengamos una pandemia y la posibilidad está dada ahí para aprender a tomar mejores medidas de control de este tipo de casos”.

El especialista en ciencias médicas en epidemiología recomendó finalmente que aquella persona que tenga una enfermedad gripal se aísle 14 o 15 días, y acuda al médico, además de cuidar a los grupos de riesgo como adultos mayores y con padecimientos crónicos.