Por: Redacción/

La secretaria de la Comisión de Desarrollo Metropolitano, diputada Ingrid Krasopani Schemelensky Castro (PAN), señaló que de acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en 2016, el 10.4 por ciento de los planteles de la Secretaría de Educación Pública (SEP) no tenía electricidad, situación que se agrava en los estados más pobres del país en los que existen instituciones con adeudos de millones de pesos.

Por ello, propuso exhortar al titular del Ejecutivo federal para que a través de las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de Energía y de Educación Pública, en el ámbito de sus competencias, promuevan la utilización de energía solar y otras fuentes renovables y limpias para producir electricidad en estos planteles.

En un punto de acuerdo que analiza la Comisión de Energía, Schemelensky Castro precisó que en el país existe un porcentaje de escuelas pertenecientes a la SEP con serias carencias en sus instalaciones eléctricas, o peor aún, planteles educativos que no cuentan con el servicio debido a los altos costos en las tarifas de luz o que no pueden pagar adeudos de hace varios años.

Indicó que en los últimos años ha aumentado el consumo de la energía solar, sustituyendo otras prácticas como la hidroeléctrica o eólica, las cuales tienen un mayor costo.

Por otro lado, la demanda de la energía eléctrica por parte de la población también está aumentando. De acuerdo con la AIE, la demanda mundial de electricidad aumentará 70 por ciento hasta 2040, además de que se considera que elevará su participación en el uso de energía final, del 18 al 24 por ciento en el mismo periodo.

La diputada argumentó que a partir de los estudios especializados en el tema de suministro de energía eléctrica, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estableció como uno de sus objetivos el de lograr el acceso universal a la electricidad en 2030.

Esto se ha convertido en un reto debido a que las proyecciones de la AIE estiman que para ese año aun existirán 800 millones de personas sin acceso al suministro eléctrico, señaló.

Pese a que esta tendencia es internacional, dijo, “es un problema que observamos a nivel nacional y obliga a pensar en alternativas para que la población mexicana cuente con el suministro de la energía eléctrica, sin que se encuentre sujeto a los recursos económicos de los usuarios”, añadió.

Resaltó que en este contexto se potencializa el uso de las energías limpias ya que hasta ahora ha aportado grandes avances al desarrollo sustentable; ejemplo de ello es que en el 2014, considerado el año más cálido desde que existen registros, se pudo crear energía solar suficiente para el consumo de grandes ciudades.

La legisladora puntualizó que las energías renovables y limpias son: el viento, la radiación solar, el movimiento del agua en cauces naturales o artificiales, la energía oceánica, el calor de los yacimientos geotérmicos y los bioenergéticos.

A partir de los análisis internacionales y nacionales sobre la utilización de las energías renovables y conscientes del problema de suministro de energía eléctrica persistente en las escuelas de educación básica del país, “se considera que el uso de energías renovables podría constituir una respuesta al problema en la infraestructura educativa en términos de suministro de luz”.

Por ello, subrayó que la energía solar se convierte en una opción que permitiría, por una parte, que las escuelas con instalaciones deficientes puedan contar con un servicio de calidad, mientras que aquellas que no tengan los recursos económicos para pagar las tarifas de luz, puedan acceder a la instalación de sistemas de energía solar con los que asegurarían el suministro de electricidad.