Por: Redacción

Por unanimidad, la Segunda Comisión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión avaló una propuesta del Grupo Parlamentario de Morena, para que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) investigue la violenta represión que sufrieron los estudiantes normalistas de Tiripetío, Michoacán, el pasado 21 de junio.

A través de un Punto de Acuerdo presentado por el diputado Juan Romero Tenorio, que fue aprobado el pasado 4 de julio, dicha bancada también solicita a las autoridades judiciales michoacanas que finquen responsabilidades contra quienes resulten responsables de estos lamentables hechos contra los alumnos de la Escuela Norma Rural “Vasco de Quiroga”.

En su documento, el legislador federal capitalino recordó que hace 18 días policías federales y estatales reprimieron, con el uso de armas de fuego, a los estudiantes que se manifestaban en una carretera cercana a las instalaciones educativas, lo que dejó un saldo de dos normalistas heridos de bala.

Expuso que hechos represivos como éste demuestran un mayor hostigamiento contra las escuelas normales rurales del país, situación que debe terminar y para lo cual se requiere que intervenga la CNDH.

“En Morena insistimos que el silencio y la falta de respuesta a los hechos violentos únicamente promueven la impunidad, que desemboca en actos como la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa”.

Consideró que estos nuevos actos de agresión no son aislados, sino que forman parte de un hostigamiento constante y de una campaña de estigmatización por parte del Gobierno del perredista Silvano Aureoles contra la educación normalista, con el único fin de lograr su desaparición.

De ahí, explicó, que el Punto de Acuerdo también incluya un exhorto al Gobierno de Michoacán para que modifique la relación de confrontación con la comunidad de la Escuela Normal Rural “Vasco de Quiroga” y priorice el diálogo para resolver los conflictos.

En ese contexto, Romero Tenorio reprobó las declaraciones del Mandatario estatal, en el sentido de que la Normal de Tiripetío constituye un centro de adoctrinamiento de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Por el contrario, resaltó, esas escuelas rurales son la única oportunidad educativa y de mejoría económica para miles de jóvenes de escasos recursos.

Por último, detalló que la represión contra los estudiantes de Tiripetío se dio apenas unos días después de una agresión similar que sufrieron normalistas de la escuela rural de Cañada Honda, a manos de la policía de Aguascalientes, lo que refleja el clima de hostigamiento contra esos centros de enseñanza.