Por Vicente Flores

La Procuraduría General de la República (PGR), por conducto de su Delegación en Colima, llevó a cabo la destrucción de 115 máquinas tragamonedas, aparatos mejor conocidos como “mini casinos”, asegurados en diversos operativos en el Estado y realizó la incineración de diversos narcóticos.

Lo anterior fue destruido e incinerado en las instalaciones de la Delegación Estatal, bajo la supervisión del personal del Órgano Interno de Control de la Institución, la Agencia de Investigación Criminal y el Agente del Ministerio Público Federal, quienes a su vez, constataron la cantidad e inhabilitación de los objetos y supervisaron que el proceso se llevara a cabo en términos de la normatividad de la materia aplicable.

El monto de la droga incinerada incluye pequeñas cantidades de marihuana, cocaína, metanfetamina y heroína, en cumplimiento con el Programa de Destrucción de Narcóticos y a lo dispuesto por el Código Federal de Procedimientos Penales, que prevé la destrucción de la droga asegurada.