Por: Redacción/
La mañana del 18 de julio de 2005, el Diario Oficial de la Federación (DOF) dio cuenta de la primera declaratoria en México a un conjunto arquitectónico como Monumento Artístico de la Nación: el perímetro original de Ciudad Universitaria, que comprende el Estadio Olímpico, el Circuito Interior Universitario, con los edificios de Rectoría, Biblioteca Central y las facultades que lo integran, así como la Alberca Olímpica, los frontones y las áreas deportivas.
Tres lustros después, Abel Zúñiga, egresado de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), desarrolló el proyecto “Murales en movimiento”, en el que a través de plataformas audiovisuales, fotografía, animación y figuras en 3D, pueden ser visitados y apreciados seis de los diez murales del campus, con motricidad.
“Es como darles un nuevo significado, revitalizar el mensaje, reapreciarlo. Se trata a estas obras y su idea original con respeto, y con base en ello, jugamos con elementos visuales, como el fuego, el viento, las nubes, las partículas, las figuras que están dentro de la composición, y concretamos una escena”, explicó el también integrante del equipo de Visitas Guiadas del Comité de Análisis para las Intervenciones Urbanas, Arquitectónicas y de las Ingenierías en el Campus Ciudad Universitaria y los campi de la UNAM.
“En estos momentos de nueva normalidad, con restricciones de socialización física, y en este periodo que corresponde al asueto de verano, se puede ‘acudir’ a CU de manera virtual, a través de este proyecto”, subrayó.
Al reproducir el arte a través de recursos audiovisuales se genera una inquietud en las personas, que a veces no ubicaban dónde estaban los murales, dijo. “Quienes nunca han venido a Ciudad Universitaria pueden ver desde su casa las animaciones, y entonces estas obras son resignificadas. Todas las pinturas en el campus tienen un aura, y ésta vive si la gente las interpreta y las entiende”.
Las animaciones, incluida la mascota llamada “Campi”, pueden apreciarse en el Facebook Campus Central de Ciudad Universitaria UNAM, que ya rebasa en conjunto las 500 mil visitas.
La Ciudad Universitaria, desarrollada por los arquitectos Mario Pani y Enrique del Moral (1949 y 1952), fue acreedora a la categoría de Monumento Artístico de la Nación hace 15 años, también por la extraordinaria arquitectura del conjunto original, que alberga diez murales realizados entre 1952 y 1956 por Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, Juan O’Gorman, Francisco Eppens y José Chávez Morado.
“Considerada obra cumbre de calidad e innovación de la arquitectura mexicana, con gran despliegue y asimilación de avances técnicos, fue edificada tomando en cuenta las nuevas necesidades de esa casa de estudios, lo que permitió una profunda integración plástica, a cuya convocatoria respondieron arquitectos, ingenieros y artistas plásticos en cantidad y calidad sin precedente”, se lee en el decreto aparecido en el DOF.
Murales animados
Tras su capacitación como integrante del equipo de Visitas Guiadas, Abel Zúñiga decidió, en noviembre pasado, animar uno de los murales más vistos de CU, que se encuentra en el auditorio Alfonso Caso (antigua Facultad de Ciencias): “La Conquista de la Energía” (1952-1953), de José Chávez Morado.
“Me pareció no el más sencillo, sino el más práctico para iniciar. No sabía si esta idea iba a concretarse, y cuando lo terminé lo subí en la página que estoy trabajando; hasta ese momento me había encargado de recapturar la realidad, pero en esta ocasión era ‘alterar’ un poco las cosas, conservando la concepción del autor”, explicó.
Así siguieron las animaciones de “El retorno de Quetzalcóatl” (1952), también de José Chávez Morado, en el Posgrado de Arquitectura; “El Pueblo a la Universidad. La Universidad al Pueblo. Por una cultura nacional neohumanista de profundidad universal”, (1952-1956), una escultopintura de David Alfaro Siqueiros, en el lado sur de la Torre de Rectoría.
Después “La superación del hombre por medio de la cultura” (1953-1954), de Francisco Eppens, al lado del Pabellón de Rayos de la Facultad de Odontología; días más tarde, “Las Fechas en la historia de México o el derecho a la cultura” (1952-1956), de David Alfaro Siqueiros.
Finalmente, dentro de un homenaje a Juan O’Gorman, realizó la animación más visitada hasta el momento: “Representación histórica de la cultura” (1952), una de las fachadas de la Biblioteca Central.
“Intenté retratar cómo sería la Biblioteca Central si por un segundo cobraran vida los elementos. Es como un códice en movimiento, como si fuera un engrane de elementos que se mueven en conjunto, como si fuera una maquinaria completa, la historia de nuestro país”.
Con formación académica también en la Facultad de Artes y Diseño, Zúñiga consideró que con este proyecto las personas pueden tener contacto con su universidad. “Nos podemos detener un momento a observar el campus de otras maneras, aunque no estemos cerca; la idea es formar un lazo”.
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