Por: Redacción/

El gobierno federal instrumenta programas dirigidos a la base social –la mayoría de los mexicanos– lo que permitirá transitar la doble emergencia económica y sanitaria derivada del COVID-19 por una ruta adecuada, “menos costosa y dolorosa de la observada en otros países, incluido Estados Unidos”, aseguró el doctor Ricardo Espinoza Toledo, profesor de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Las medidas para atender simultáneamente ambos aspectos podrían sostener las finanzas nacionales, porque el “sistema internacional está en crisis y todos los regímenes del orbe –a pesar de que algunos son los grandes promotores de la globalización– están encerrados en sus fronteras” ocupados en resolver su situación local.

Respecto del plan del presidente Andrés Manuel López Obrador para reactivar la economía ante el trance por el coronavirus sostuvo en entrevista que “los efectos –tan fuertes y negativos, no sólo en la salud sino también en las finanzas– han creado “una emergencia dentro de una emergencia, porque venimos de una enorme desigualdad y nos cae este fenómeno mundial, que también nos altera”.

El académico del Departamento de Sociología de la Unidad Iztapalapa sostuvo que a esto se suma la caída de los precios del petróleo, así que hay un daño generalizado, porque “estábamos afectados antes de empezar, pero las autoridades están tomando medidas que consisten en prestar atención a lo básico, que es lo sanitario, pero también a las dimensiones social y económica”.

El mandatario ha planteado una ecuación diferente, con un esquema nuevo que busca ser un “modelo de desarrollo incluyente que atienda lo que siempre estuvo abandonado y dé cabida a los intereses y las necesidades de los más pobres”, en un país donde la mitad de los habitantes vive en condiciones de pobreza y pobreza extrema y más de 50 por ciento de la población económicamente activa (PEA) trabaja en el sector informal.

Los ejes propuestos por López Obrador para la recuperación financiera tienen viabilidad y ofrecen las mismas oportunidades para los diferentes sectores sociales, con los programas Sembrando vida o Construyendo el futuro, así como el apoyo a adultos mayores y la generación de empleos a través de la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, la Refinería de Dos Bocas o el Tren Maya.

La estrategia contra la pandemia está instrumentando una serie de programas para estar al pendiente de los pequeños comerciantes –que durante este periodo han visto reducidas sus actividades– con la oferta de créditos o las llamadas tandas, entre otros elementos, que han sido cuestionados, aun antes de la emergencia, porque la situación financiera del país es muy complicada debido a grupos muy poderosos que defienden sus intereses, algunos legítimos y otros que “con el disfraz de oposición protegen sus privilegios”.

Ese viejo modelo generó prerrogativas y beneficiados, en “un número no significativo frente a los 120 millones de mexicanos”, pero que sin embargo no están dispuestos a perder el lugar de ventaja derivado de la asociación con anteriores gobiernos y funcionarios públicos.

El también miembro del Sistema Nacional de Investigadores expuso que la oposición política es necesaria para el funcionamiento de la democracia y la república, pero que incluso “las decisiones acertadas serán cuestionadas”.

La visión y la misión del gobierno federal “son muy distintas a las de todo Estado y por eso está instrumentando acciones diferentes a las anteriores, al no repetir las recetas del pasado ni seguir el mismo camino que condujo al estancamiento económico y la profundización de la desigualdad, que a su vez llevó a una inseguridad desmedida”.

Lo cierto es que en una vez que logre definir el interés nacional y ubicarlo por encima del individual –sin que esto vaya en detrimento de la igualdad, la libertad y el acceso a la justicia– “daremos solidez al proceso de cambio, con cimientos sólidos en la construcción del México que todos queremos.

“La gran tarea de la administración de López Obrador es, no sólo llevar a cabo las acciones adecuadas sino convencer y, en la medida en que se vaya constatando que no es en perjuicio, sino en beneficio, se logrará la transformación del país que tanto hace falta”, concluyó el doctor Espinoza Toledo.