• La encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva del Sipinna nacional, María Constanza Tort, señaló que se apoyan acciones en Guadalupe, Nuevo León, en beneficio de 90 mil niñas, niños y adolescentes.

Por: Redacción/

Se llevó a cabo la primera sesión del Sistema Municipal de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), Guadalupe, Nuevo León, como ente de coordinación necesario para asegurar que las políticas de la federación, el estado y el municipio lleguen a la vida cotidiana de niñez y adolescencia en el territorio.

La encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva del Sipinna nacional, María Constanza Tort, destacó la importancia de dicha sesión y señaló que el estado de Nuevo León y sus municipios, incluido el de Guadalupe, han asumido el compromiso de coordinar sus acciones con la federación para garantizar un mejor presente y futuro para la niñez.

Enfatizó que se está ante una responsabilidad compartida entre los tres órdenes de gobierno, que debe dar como resultado la construcción de mejores condiciones de vida para la niñez. “Para eso estamos hoy aquí, para lograr que los sueños de cerca de 90 mil niñas, niños y adolescentes que viven en el municipio neoleonés de Guadalupe, sean una realidad; para que tengan un mejor presente y un futuro mucho más promisorio”.

Apuntó que los municipios de México son la base de la pirámide donde se construyan políticas públicas estables y sólidas para mediano y largo plazos, pero no deja de reconocer que esas demarcaciones suelen tener pocas atribuciones y presupuesto para resolver la problemática que enfrentan la niñez y adolescencia en su territorio.

Además, es necesario reconocer la enorme diversidad social y cultural que tiene cada uno de los 2 mil 450 municipios del país, y que la implementación de una política nacional en materia de derechos para la niñez y la adolescencia -grupo de población que en sí mismo es amplio y diverso- representa un reto enorme.

La integración y funcionamiento coordinado de los Sipinna nacional, estatales y municipales, en un sistema de sistemas, debe abonar a erradicar problemas históricos y estructurales que durante décadas ha enfrentado este grupo de la población, como son:

• La erradicación de la pobreza extrema, principalmente de la población indígena, con lo que también se afronta el tema de la desigualdad y discriminación.

• Los problemas relacionados con la violencia que se enfrenta desde abajo con políticas efectivas en materia familiar, educativa y laboral, a través de mecanismos de crianza positiva y trato amoroso.

• En materia de salud, la prevención del alto riesgo social y económico que representan las enfermedades crónico-degenerativas, con programas eficientes de alimentación que prevengan la desnutrición y la obesidad infantil. Aunado a ellodeben atenderse los efectos que podría tener la pandemia por Covid-19 en la niñez y la adolescencia en los años que están por venir.

• La desigualdad de género que se combate con mejor educación y mayores oportunidades para las niñas y las adolescentes, empoderándolas a través de mecanismos que permitan su desarrollo integral.

Es importantísimo que el municipio cuente con un diagnóstico de la situación de la niñez y la adolescencia, pues no se puede construir una política de infancia sin conocer las características y necesidades de esegrupo de población, y es fundamental seguir dando voz a niñas, niños y adolescentes en los asuntos que son de su interés.