Por: Redacción/
¡La última y nos vamos! hace una lectura –lo más cercana posible– al gran e inabarcable Felipe Ehrenberg, por lo que la muestra ofrece un atisbo más a su trabajo y da luz a quienes han seguido al artista, afirmó hoy Santiago Espinosa de los Monteros, director de Artes Visuales y Escénicas de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
En una conferencia de prensa previa a la inauguración –el próximo 29 de mayo– de la exposición manifestó el honor que representa para la Galería Metropolitana albergar parte de la obra de un creador con una vasta producción e ideas maravillosas.
La muestra fue planeada desde antes del fallecimiento de Ehrenberg, hace un año, pero es ahora cuando la Casa abierta al tiempo retoma el proyecto siguiendo las directrices y la confección que el propio autor trazó.
Víctor Muñoz Vega, curador de la muestra y amigo del artista plástico, quien formó parte del colectivo Proceso Pentágono, indicó que “él fue uno de los artistas conceptuales más interesados en las expresiones populares de nuestras culturas”.
La exposición constituye un breve recorrido por la obra del escultor y grabador que pretende mostrar la variedad de técnicas que cultivó desde que tenía 13 años y concluyó hasta el día de su muerte.
Mediante una posición inquebrantable de comunicar y encontrar nuevas expresiones, Ehrenberg “fue coherente a lo largo de todos estos años con una actitud de revisión de los lenguajes, no sólo visuales, en los recorridos que hizo por los artes conceptual o grupal, por la neográfica, la instalación y el performance”, abundó.
Lourdes Hernández, viuda del artista, compartió algunas anécdotas que dejaron ver el carácter profundamente creativo y experimental de su esposo, quien gustaba de trabajar largas jornadas y utilizar cualquier material como vehículo expresivo.
Uno de los objetivos es conocer el amplio trabajo de este creador, ya que muchas veces se reduce a su labor de los años sesenta del siglo pasado, por lo que esta es una oportunidad para mostrar sus otras etapas y facetas de producción.
Dibujo, instalación, fotografía y gráfica, entre otros, son los medios de los que se valió Ehrenberg, ajeno al formalismo y las virtudes acartonadas, para construir una expresión propia con la que plasmó una conversación con su entorno.
Destacan la serie inédita Casos aislados, que resultó al intervenir una colección personal de pequeños objetos que ensamblaba como escenarios plásticos y cuyo valor reside en el factor procesual, ya que cada una de las piezas representa una parte de su vida, por lo que hay que verlo como un mapa inventivo.
También se presenta la serie Factor RH, que resulta de un juego entre el rumor y el humor, en un trabajo que integra dibujos y piezas en técnica mixta que poseen tintes de ironía y crítica social, retomando memes y otros elementos iconográficos populares.
Además sobresale un conjunto de 30 dibujos –realizado para una edición mexicana de la novela Dr. Jekyll and Mr. Hyde– en el que se valió del contraste de tintas, en particular sanguina y carboncillo.
El dibujo tríptico El camino, inspirado en el trabajo experimental de John Cage y los primeros artistas de Fluxus, tiene un sentido de corte de caja al final de la vida, aunque desde el punto de vista artístico es casi una partitura.
Pas de deux está conformada por dibujos de carácter erótico en los que el artista se involucra en la acción plástica con la modelo, mediante trazos que retratan la anatomía humana en toda su grandeza y desnudez.
En el recinto de la UAM también se llevarán a cabo algunas actividades paralelas que incluyen mesas de reflexión en torno a la participación del pintor en el cine, el mundo editorial, las artes del cuerpo y el performance, así como los trabajos colectivos y los grupos sociales con los que colaboró.
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