• De acuerdo con la doctora Mitzi Danae Morales Montes, a lo largo de estos meses de trabajo a distancia se ha observado una mayor flexibilidad de profesores para enseñar, evaluar y realizar actividades.

Por: Redacción/

La pandemia de COVID-19 ha demostrado la gran capacidad de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) para acoplarse a situaciones cambiantes, lo cual es una buena señal de su posibilidad de adaptación y de respuesta ante la crisis, coincidieron académicos del Departamento de Estudios Culturales de la Unidad Lerma.

En el ámbito institucional, la Casa abierta al tiempo diseñó el Proyecto Emergente de Enseñanza Remota (PEER) y han sido planteadas estrategias de largo plazo que permitan hacer frente a la transición abrupta al aula virtual, como es el caso de la Licenciatura en Educación y Tecnologías Digitales en la citada sede universitaria, expresó el maestro Juan Carlos López García al participar en el programa UAM, Responsabilidad social frente al COVID-19, que se transmite todos los miércoles, a las 12:00 horas, en el 94.1 FM.

El doctor Daniel Hernández Gutiérrez, coordinador de dicha licenciatura de reciente creación, explicó que la primera generación entró en 2018 y cobra valor en un contexto en el que los alumnos están viviendo una situación atípica que pone en relieve mucho de lo que ellos estaban cursando de manera teórica, ya que el plan de estudios no sólo se enfoca en aspectos de enseñanza aprendizaje a distancia, sino también en ambientes pedagógicos comunicativos, tecnológicos y de investigación.

“Tenemos un cúmulo de retos ante un mundo que va a ser muy distinto al que conocíamos, en el que las tecnologías y su aplicación crítica y reflexiva son relevantes, y dicha oferta educativa es un terreno fértil para crear ideas, innovar y estar presentes en el debate, no sólo al interior de la UAM, sino en general en México”, expuso en la emisión en la que abordaron el tema de Reflexiones sobre la educación y tecnologías digitales.

De acuerdo con la doctora Mitzi Danae Morales Montes, a lo largo de estos meses de trabajo a distancia se ha observado una mayor flexibilidad de profesores para enseñar, evaluar y realizar actividades que permitan la enseñanza y, por otro lado, también se ha podido apreciar la creatividad de los universitarios para producir videos, podcast y otros materiales distintos a los que se harían en la modalidad presencial, lo cual es valioso”.

Sin embargo, reconoció que entre los desafíos importantes está el integrar a quienes se quedaron desconectados o marginados de la enseñanza remota por motivos económicos, ya que en el país existe una brecha digital y una desigualdad de género relacionada con el aprendizaje y la educación.

“La mayoría de las mujeres involucradas en la educación superior estamos participando en las labores de la casa más de lo que ya lo hacíamos, lo cual no quiere decir de modo alguno que los varones no lo hagan, pero hay una mayor carga sobre la población femenina, por lo que debe valorarse el esfuerzo de las estudiantes y las profesoras investigadoras”.

Más allá de la conexión a internet de los dispositivos y de todas las condiciones materiales que requiere esta modalidad es necesario tomar en cuenta las condiciones cognitivas de los alumnos y las capacidades diferenciadas de organizar el estudio y el trabajo autónomo.

El doctor Santiago Alonso Palmas Pérez consideró importante la forma en la que se concibe la educación en esta pandemia, si se toma en cuenta que 3.8 millones de hogares no cuentan con la tecnología suficiente –ya sea de acceso a internet, equipo de cómputo o televisión– por lo que el panorama es complicado y es momento de ser muy creativos e idear formas didácticas a distancia.

La situación actual ha develado las profundas desigualdades que atraviesa la educación mexicana, no sólo respecto del acceso y la disponibilidad de las tecnologías de Información y Comunicación (TIC´s), sino también las divergencias de los conocimientos necesarios para su uso y apropiación.

El doctor Hernández Gutiérrez agregó que con ciertas limitantes propias del contexto sociocultural y económico del país se tuvo que mover prácticamente la modalidad de educación presencial a la virtual, en línea, a distancia o remota.

“México no está tan bien parado en cuanto al acceso a las TIC´s, en el 2016 se ubicó en el lugar 87 a nivel mundial y en el número 8 a nivel América Latina, de acuerdo a indicadores de la Unión internacional de telecomunicaciones, lo cual marca justamente una brecha digital”.

De acuerdo con el maestro López García, los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía señalan por un lado incrementos importantes en el acceso a las TIC´s a lo largo de las últimas dos décadas, sin embargo, México mantiene su propia fisura interna, ya que mientras en los estratos socioeconómicos más altos prácticamente nueve de cada diez hogares tienen acceso a internet, en los más bajos la cifra baja hasta dos de cada diez.

UAM, Responsabilidad social frente al COVID-19 es transmitido todos los miércoles, a las 12:00 horas, por UAM Radio 94.1 FM, con la conducción de Carlos Urbano Gámiz.