Por: Redacción/

En el senado de la República se llevó a cabo la sesión solemne de la Conmemoración del 66 Aniversario del Derecho al Voto de las Mujeres en México, en la que las y los senadores de Morena se mostraron orgullosos de los avances en la materia y dispuestos a seguir abonando en el esfuerzo de la igualdad y paridad de género.

En su participación la senadora Malú Micher Camarena dijo que hoy en día contamos con un Congreso paritario, “una reforma constitucional en materia de paridad de género que asegura que las mujeres participemos en pie de igualdad con los hombres en todos los espacios políticos de toma de decisiones”.

Señaló que aún quedan pendientes, pues no hemos tenido una mujer presidenta; sólo 7 mujeres han ocupado el cargo de gobernadoras. Sin contar que, en los últimos 70 años, sólo 21 mujeres han ocupado el cargo de secretarias de Estado y sólo mil 523 mujeres han sido presidentas municipales.

La también presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género mencionó a Hermila Galindo quién en 1916 envió al Constituyente un escrito en el que solicitó los derechos políticos para las mujeres argumentando que:

“Es de estricta justicia que la mujer tenga el voto en las elecciones de las autoridades, porque si ella tiene obligaciones con el grupo social, razonable es, que no carezca de derechos. Las leyes se aplican por igual a hombres y mujeres: la mujer paga contribuciones, la mujer, especialmente la independiente, ayuda a los gastos de la comunidad, obedece las disposiciones gubernativas y, por si acaso delinque, sufre las mismas penas que el hombre culpado. Así pues, para las obligaciones, la ley la considera igual que al hombre, solamente al tratarse de prerrogativas, la desconoce y no le concede ninguna de las que goza el varón”.

Micher Camarena aseguró que la sociedad necesita alcanzar una representación equilibrada entre mujeres y hombres en todos los espacios públicos para lograr las transformaciones sociales necesarias; una representación que asegure que las necesidades y los intereses de las mujeres y las niñas sean considerados como parte fundamental de las políticas públicas de nuestro país.

“El país tiene un pendiente con las mujeres que participan en la vida política: la violencia política en su contra”, aseguró. Esta violencia comprende todas aquellas acciones u omisiones de personas, servidoras o servidores públicos que se dirigen a una mujer por ser mujer, con el objeto o resultado de menoscabar o anular sus derechos político-electorales, incluyendo el ejercicio del cargo.

“Es una violencia que impacta en el derecho humano de las mujeres a votar y ser votadas en los procesos electorales; a su desarrollo en la escena política o pública, ya sea como militantes en los partidos políticos, aspirantes a candidatas a un cargo de elección popular, a puestos de dirigencia al interior de sus partidos políticos”.

Ante esto, Malú Micher dijo que las y los senadores seguirán trabajando por la democracia paritaria “porque una democracia en la que la mitad de la población no posee el estatus de ciudadanía, carece de legitimidad. Trabajamos por un país de iguales, un país justo, un país en paz. Porque estamos ciertas, como lo estuvieron ellas, que sin las mujeres no hay democracia; sin las mujeres, no hay justicia; sin las mujeres, este país no logrará la paz”.