• La instrucción implica siempre la interacción entre alguien que precisa aprender algo y quien cuenta con la competencia y la voluntad para enseñarlo.

Por: Redacción/

La educación remota y a distancia ha provocado una reflexión profunda sobre el modelo pedagógico y la manera en que se debe enseñar y aprender, coincidieron los doctores Gregorio Hernández Zamora, Mitzi Morales Montes y Leonel Pérez Expósito, profesores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Al participar en el Ciclo de Foros académicos: La investigación UAM presente ante la pandemia, los académicos de la Casa abierta al tiempo expresaron que si bien el uso de los recursos digitales y tecnológicos ha representado un ahorro en tiempo y energía, además de formas nuevas de adquirir y promover el conocimiento, la presencialidad sigue manteniéndose como el espacio de socialización y consumo cultural que necesita recuperarse.

La instrucción implica siempre la interacción entre alguien que precisa aprender algo y quien cuenta con la competencia y la voluntad para enseñarlo; la intercomunicación entre esas dos entidades, sujetos o agentes –que pueden ser colectivos o individuales– marca la diferencia con una experiencia de aprendizaje que no es educativa “y eso dificulta la modalidad remota, ya que aun con todos los avances tecnológicos hay una serie de impedimentos, como el no sentirnos vistos ni escuchados”, señaló el doctor Pérez Expósito, catedrático del Departamento de Relaciones Sociales de la Unidad Xochimilco.

El doctor Hernández Zamora expuso que las instituciones de nivel superior son zonas de socialización secundaria fundamentales para abrir horizontes y dar holgura a actividades, recursos y experiencias que la gente sólo vive en esos recintos.

Las universidades son sitios de formación personal en tres aspectos: profesional, ciudadano y como individuos con una cultura general y capacidades de comunicación, expresión y actuación social; en ese sentido son una especie de micro comunidad que ofrece excelentes condiciones para que se desarrollen todas estas habilidades, apuntó el profesor del Departamento de Educación y Comunicación de dicha sede académica.

La doctora Morales Montes consideró que como docentes, el reto es pensar cómo se va a educar en estos tiempos de cambio y crisis, en especial en la dimensión humana y en las potencialidades para ser más resilientes, empáticos, tolerantes a la frustración y cuidadosos de la salud mental.

Todo esto debido a que “se corre el riesgo de llevar lo tradicional por medios digitales, pero no es cuestión de poner la tecnología y ya, sino de realizar un análisis más profundo sobre el modelo formativo”, pues la educación remota ha evidenciado las diferentes condiciones de estudio a las que se enfrentan los alumnos y, por lo tanto, las desigualdades en los entornos de aprendizaje, explicó la investigadora del Departamento de Estudios Culturales de la Unidad Lerma.

Salta a la vista la inequidad de recursos y se perciben aun más las brechas cognitiva y digital existentes, en cuanto a la disponibilidad y el acceso a Internet o los dispositivos, sin embargo, los modos en que el conocimiento está permeando en el ambiente familiar destacan, pues al estar la escuela en la casa puede lograrse un efecto positivo que contribuye al capital cultural de los seres queridos, apuntó Morales Montes.

“Cuando el aula es mucho más desigual, el reto para la enseñanza es mayor y a eso nos enfrentamos ahora como educadores”, manifestó el doctor Pérez Expósito.

En el caso de los profesores, el cambio de medio y modalidad ha derivado en una toma de conciencia de “nuestra práctica y función en general”, lo que se traduce en un impacto respecto de las formas de evaluación, mayor flexibilidad y atención a lo que cada estudiante asimila.

“Esto lo deberíamos mantener en lo presencial, es decir, seguir planeando nuestras sesiones, tener conciencia de nuestra labor docente y de una pedagogía más diferenciada, además de preocuparnos por que todos aprendan”, agregó.

Con el tema Educación superior y pospandemia: ¿Con qué nos quedamos y de qué nos deshacemos?, el conversatorio fue moderado por la doctora Alejandra García-Franco, adscrita al Departamento de Procesos y Tecnología de la Unidad Cuajimalpa.

Los Foros académicos: La investigación UAM presente ante la pandemia –una iniciativa promovida por la Rectoría General de la Casa abierta al tiempo– se realizan en su segunda temporada todos los jueves, a las 17:00 horas, por los canales oficiales:
www.facebook.com/uam.mx
y www.youtube.com/user/UAMVIDEOS