Por: Redacción

A través de un comunicado la  Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó que solicitó medidas cautelares a la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), para que durante los operativos los elementos de la Gendarmería y la Policía Federal se abstengan de agredir y que garantice que quienes cubren las movilizaciones por el incremento en el precio de los combustibles como parte de su labor periodística, puedan hacerlo sin ser agredidos u obstaculizados por servidores públicos de dichas corporaciones.

Lo anterior se debió a los hechos registrados el pasado sábado 7 de enero en Rosarito, Baja California, cuando durante el desalojo de manifestantes de la planta de Petróleos Mexicanos (PEMEX), agentes de la Gendarmería golpearon a los periodistas Laura Sánchez Ley y Luis Alonso Pérez, quienes cubrían esos sucesos, y a otros periodistas les rompieron el equipo fotográfico que llevaban.

Personal del Programa de Agravios a Periodistas y Defensores Civiles de Derechos Humanos de la CNDH sostuvo comunicación con los reporteros, a quienes ofreció el acompañamiento del personal de la oficina foránea de la CNDH en la ciudad de Tijuana, a fin de presentar la denuncia correspondiente.

Asimismo determinó iniciar una queja de oficio y el mismo sábado 7 solicitó medidas cautelares al gobierno de Baja California a fin de implementar la protección y la atención médica necesaria los periodistas lesionados.