Por Redacción

 La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el asesinato del periodista Elidio Ramos Zárate, ocurrido el 19 de junio en la localidad de Juchitán, estado de Oaxaca, México, e instó a las autoridades mexicanas a actuar de manera pronta y oportuna para investigar el crimen e identificar y sancionar a los responsables.

De acuerdo a la información disponible, el reportero recibió dos balazos a quemarropa en la cabeza por parte de desconocidos mientras cubría una protesta de maestros en el sur de Oaxaca y murió en el lugar.

Ese mismo fin de semana, otras 6 personas más perdieron la vida sobre la carretera México-Oaxaca, a la altura de Asunción Nochixtlán, durante enfrentamientos de policías federales, estatales y municipales contra miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

Ramos Zárate cubría la sección “policiaca” del periódico El sur del Istmo y supuestamente había recibido amenazas para que no escribiera sobre actos violentos. Al momento de ser asesinado se encontraba en la cobertura de disturbios y bloqueos que mantienen profesores de Juchitán.

Este es el sexto asesinato de un periodista en México ocurrido este año: el 21 de enero fue asesinado Marcos Hernández Bautista en la localidad de San Andrés Huaxpaltepec, estado de Oaxaca; el 9 de febrero Anabel Flores Salazar fue hallada muerta en el estado de Puebla; el 20 de febrero fue encontrado sin vida el cuerpo de Moisés Dagdug Lutzow en el estado de Tabasco; el 25 de abril fue asesinado Francisco Pacheco Beltrán en Taxco, estado de Guerrero y el 14 de mayo falleció de un disparo en la cabeza el periodista Manuel Torres González en la localidad de Poza Rica, estado de Veracruz.

La Relatoría manifestó especial preocupación por la reiteración de este tipo de actos violentos contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en México.

En 2014 fueron ocho los comunicadores asesinados en el país presuntamente por el ejercicio de su libertad de expresión y en 2015 se registraron seis casos. El estado de Oaxaca ha sido uno de los más violentos para los periodistas de ese país en los últimos años. El Estado mexicano informó que la Fiscalía General del Estado de Oaxaca inició una investigación sobre estos hechos.