Por: Redacción/

El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó con 443 votos, el dictamen que declara el 5 de septiembre de cada año como “Día Nacional de la Mujer Indígena”, para generar medidas afirmativas y acciones compensatorias que reduzcan las desigualdades que pesan sobre esta población, hacerlas partícipes en los espacios de toma de decisiones y construir políticas que valoren sus aportes.

El documento, enviado al Senado de la República para sus efectos constitucionales, precisa que esta fecha va en congruencia con el “Día Internacional de la Mujer Indígena”.

De acuerdo con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, existen 68 comunidades nativas; la labor de filósofos, historiadores, educadores, en pro del reconocimiento de sus lenguas y la revalorización, respeto y animación de sus principios culturales, es una de las facetas de la tarea que el Estado tiene como deber.

En la fundamentación del dictamen de la Comisión de Gobernación y Población, la diputada Flora Tania Cruz Santos (Morena) expresó que desde esta Legislatura de la Paridad de Género, se debe “antes que nada, reconocer nuestra integración multicultural, multiétnica, multigeneracional y multigenérica”.

Indicó que poco más de 12 millones de habitantes son o se consideran indígenas, esto porcentualmente es casi el 10 por ciento de nuestra población. Por ello, “la importancia de un día nacional que reconozca no sólo el género, sino también el origen étnico que representa el 5.1 por ciento de la población total nacional”.

Aprobar este dictamen, añadió, es apoyar el reconocimiento de la vida y obra del 5.1 por ciento de la población mexicana. “Decretemos este día, avivemos un impulso legislativo en pro de los derechos humanos de las mujeres, pero en especial de las indígenas”.

Cruz Santos precisó que esta fecha ayuda a ser un enlace universal que reconozca a las mujeres indígenas y evite la agresión y la violencia que, de acuerdo a estudios internacionales, sucede en mayor cantidad, en contra de esta población.

“Es necesario un día que nos recuerde que las leyes que emanen de este y otros Congresos, deben ajustarse a las condiciones de vida de las mujeres indígenas y sus derechos humanos para recibir servicios básicos, educación, salud, liberar su alma y cuerpo del dominio que por siglos han subyugado su estatus”, añadió.

Conmemorar esta fecha, subrayó, es “recordar la obligación constitucional de equilibrar las leyes, de dar esa pauta de equidad que los derechos humanos nos obligan a realizar a favor de la mujer indígena, no sólo de forma tersa sino eficiente, visible y palpable”.

María Roselia Jiménez Pérez (PT), diputada promovente, mencionó que las mujeres conforman el 51.4 por ciento de la población. Las indígenas que habitan en México suman 13.2 millones de personas que junto a “nuestros hermanos indígenas representamos el 21.5 por ciento del total de la población”.

En México, de acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, las mujeres indígenas tienen derechos que deben ser respetados y defendidos por toda la sociedad; entre ellos, a una vida digna, al reconocimiento de sí mismas como integrantes de un pueblo, así como expresar su cosmovisión filosofía y creaciones en su propia lengua, entre otros.

“Seamos realistas, la discriminación, el racismo, la violencia por género, la pobreza extrema, el monolingüismo, entre otros, las colocan en situaciones de exclusión de oportunidades que aumentan las desigualdades. Así el acceso a la justicia se vuelve casi una utopía”, añadió.

La también promovente, diputada Irma Juan Carlos (Morena) indicó que el 5 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Mujer Indígena, un suceso que ha sido reivindicado por las organizaciones indígenas donde reconocen la lucha de esta población nativa, y ese día fue instaurado en recuerdo de una lideresa indígena: “Bartolina Sisa, que luchó contra la dominación española y murió a manos del ejército realista el día 5 de septiembre de 1782. Torturada, ahorcada y descuartizada, y luego su cabeza fue exhibida en los sitios en donde luchó, para escarmiento de los pueblos originarios opuestos a la colonización en Tiwanaku, Bolivia”.

Añadió que en honor a la lucha histórica de las mujeres indígenas, el movimiento latinoamericano hace un reconocimiento de militancia y participación política. En México uno de cada diez mexicanos es indígena y un gran porcentaje de esta población está conformada por mujeres. La labor que realizan muchas veces no es reconocida, ya que se enfrentan a diversas desigualdades por ser mujer, indígena y pobre.

Las mujeres indígenas en México, dijo, han garantizado la reproducción de las lenguas, de las culturas y tradiciones de las comunidades. “Esta iniciativa reconoce la importancia de fortalecer sus derechos y mandata a los gobiernos a que tomen las medidas necesarias para garantizar sus condiciones de vida”.