Por: Redacción/
Anticipar la reapertura de guarderías del IMSS sin que haya un descenso sostenido en los casos de Covid-19, es una acción irresponsable que puede convertir a estos lugares en nuevo foco de contagios y poner en riesgo la salud de los niños y del personal que estaría a su cuidado, advirtió Adriana Díaz Contreras, integrante de la Dirección Nacional Extraordinaria (DNE) del Partido de la Revolución Democrática.
Señaló que el director del IMSS, Zoé Robledo, ha justificado esta decisión con el argumento de que las guarderías son un servicio esencial y con su reapertura se busca apoyar a las madres trabajadoras. Sin embargo, estas razones no son suficientemente válidas en el momento actual en que se encuentra la pandemia, con más de 6 mil contagiados en un día y 268 mil 008 casos confirmados y que ha dejado hasta el momento 32 mil 014 defunciones.
Díaz Contreras aclaró que no se opone a que las guarderías se reabran y que las madres trabajadoras puedan contar con este servicio para cuidar a sus hijos, sin embargo, esto debe hacerse cuando haya las condiciones necesarias para proteger la salud de los niños, que debe ser la prioridad; por ello, llamó a Robledo a no tomar una decisión precipitada por motivos políticos y esperar a que haya una menor incidencia de contagios.
Recordó que la OMS ha sugerido a los gobiernos que no reanuden las actividades, sin antes comprobar que la positividad de las pruebas de diagnóstico sea del 5% por 14 días consecutivos. Por ello, insistió una vez más en la necesidad de la aplicación de pruebas, como una medida que ofrecerá más certeza de que la reapertura no implicará un riesgo mayor para los menores y las propias madres trabajadoras.
“Las guarderías no deben abrirse hasta que se cumpla la recomendación de la OMS, y hasta que el semáforo sanitario esté en verde. Es criminal que se exponga a los niños y niñas a una pandemia que no ha sido controlada, y sean sometidos a una normalidad plagada de contagio y muerte”, manifestó.
Para Díaz Contreras, existen otras alternativas con las que el IMSS puede apoyar a las madres trabajadoras con el cuidado de sus hijos, sin exponerlos a riesgos innecesarios. Una de ellas es promover que las madres puedan permanecer en sus casas, con goce sueldo y otra, consiste en impulsar que haya un presupuesto adicional que permita otorgar un salario solidario a los adultos que se queden a cargo de los niños de las madres que trabajan y ya no puedan hacerlo desde sus hogares.
Estas propuestas pueden ser una mejor respuesta ante los nuevos problemas que plantea la pandemia, en vez de jugar con la vida de los niños con una decisión prematura y poco meditada, motivada por la desesperación, concluyó.
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