Por: Redacción/
En la Universidad Nacional el objetivo es que esta institución tenga un tejido comunitario cohesionado, sea lugar igualitario, de respeto a las diversidades, libre de violencia de género, vanguardista y de referencia en la materia en México y el mundo, afirmó Tamara Martínez Ruiz.
La coordinadora para la Igualdad de Género en la UNAM refirió que al plantear el tema es necesario reconocer que históricamente las mujeres han sido discriminadas, y que en muchos ámbitos se registra extrema desigualdad y violencia insostenible contra ellas.
La búsqueda de la igualdad de género es, en realidad, la de un derecho humano necesario, puntualizó.
Hoy son necesarias acciones que eliminen esa desigualdad histórica y que acorten las brechas entre hombres y mujeres, de manera que se asienten bases para una efectiva igualdad de género, refirió.
Al participar en el seminario permanente Política Pública de Género: Igualdad y violencia de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS), la funcionaria reconoció que la Universidad es un espacio emancipador, de reflexión, donde se ponen temas sobre la mesa, en la agenda, donde se critica y se piensa cómo alcanzar una mejor sociedad.
En la conferencia “Política de igualdad y atención a la violencia de género en la UNAM”, Tamara Martínez dijo: en la vida cotidiana, política y universitaria de nuestro país hay un movimiento que exige un “ya basta”, un alto a la violencia de género. Y es que nueve de cada 10 denuncian que han sido agredidas en el hogar por un familiar, pero también en los espacios públicos (calles, parques, transporte), laborales y escolares.
En el caso de la Universidad las alumnas han planteado en sus pliegos petitorios la necesidad de hacer frente a esa violencia a partir de la construcción de procesos efectivos de prevención, atención, investigación, seguimiento, acompañamiento a víctimas, sanción, reparación del daño y construcción de nuevas formas de tejido social, y desde una demanda de igualdad.
Para combatir la violencia de género y garantizar la igualdad sustantiva, en la UNAM se ha atendido el problema y se crearon estrategias de sensibilización y prevención; además de reformas y acciones legales que garantizan la permanencia de las distintas medidas para lograr este objetivo.
En la prevención de la violencia por razones de género es fundamental deconstruir y reconstruir nuevas masculinidades, y lograr un modelo comunitario más igualitario, abierto e incluyente, sostuvo la experta, luego de considerar que se requiere enlazar y articular el trabajo de las entidades y dependencias universitarias a favor de la igualdad sustantiva y los derechos humanos.
Recordó entonces los avances a lo largo de la historia: la fundación del Programa Universitario de Estudios de Género que en 2018 se convirtió en Centro; las reformas al Estatuto General; la creación de la Comisión Especial de Equidad de Género del Consejo Universitario; los Lineamientos Generales para la Igualdad de Género; el Protocolo para la Atención de Casos de Violencia de Género y las Unidades para la Atención de Denuncias.
Asimismo, las comisiones internas de Igualdad y Equidad de Género se fortalecen en las entidades; y se tipificó como causa grave de responsabilidad la violencia de género.
De igual modo, en este año se llevó a cabo la reestructuración de la Defensoría de los Derechos Universitarios, Igualdad y Atención a la Violencia de Género, la cual recibe denuncias de todos los sectores de la comunidad y coadyuva en la estrategia para su prevención, atención, sanción y erradicación, entre otras acciones.
También en 2020 se creó la Coordinación para la Igualdad de Género en la UNAM, que articula a los sectores de la Universidad (especialistas, alumnado, academia, administración), enlaza, construye, transversaliza y difunde acciones en torno al tema.
Por ejemplo, abundó, se apoya el diálogo entre comunidades, se promueven charlas y pláticas de sensibilización con orientadores vocacionales y responsables de área de atención a la comunidad; se imparten cursos para las autoridades universitarias, y se elaboran materiales sobre género, diversidad y derechos humanos, entre otras actividades.
Hay que entender que lo que perjudica a las mujeres daña a toda la sociedad. No se trata de que la violencia y la desigualdad sea un problema de ellas, sino estructural, social, que debe ser atendido por todos, finalizó Tamara Martínez Ruiz.
En la sesión estuvieron presentes la directora de la ENTS, Carmen Guadalupe Casas Ratia, y Julia del Carmen Chávez Carapia, del Centro de Investigación y Estudios de Género de la propia entidad.
No Comment