Por: Redacción
La capacidad del Estado mexicano para atender en condiciones dignas la creciente presencia de migrantes estacionados en la frontera norte está rebasada, por lo que urge replantear la política migratoria para que responda a la inminente aplicación de la anunciada estrategia racista de Donald Trump, afirmó el diputado federal del PRD, Rafael Hernández Soriano.
Ahora que es un hecho el arribo de Trump a la Casa Blanca en enero próximo, debemos estar preparados como país para hacer frente a una política hostil y racista que prometió a sus electores el futuro presidente del vecino país del norte, subrayó.
El secretario de las comisiones de Derechos de la Niñez y la de Gobernación recorre desde el pasado día 16 albergues migratorios, aduanas y la línea fronteriza en la ciudad de Tijuana, además se ha reunido con representantes del Instituto Nacional de Migración, personal del DIF de Baja California y organizaciones civiles, a fin de identificar las facetas de la migración transcontinental.
“Nos han informado que desde la declaratoria de alerta migratoria se registró un aumento de centroamericanos, connacionales, haitianos y africanos en la zona fronteriza; las autoridades deben proteger a todos los migrantes, máxime porque abandonaron sus países o estados –como los mexicanos- por causas como violencia, desastres naturales o carencias económicas”, señaló.
En ese sentido, Hernández Soriano hizo un llamado a todos los órdenes de gobierno -el federal, estatal y municipal- para que tengan un mayor involucramiento en la atención del fenómeno migratorio, y conminó a la sociedad civil a ser más sensible con este tema, como es el caso de la población de Tijuana, la cual se muestra muy activa con esta problemática pues ha instalado más de 60 casas de atención a migrantes, mientras que las autoridades sólo cuentan con un albergue temporal para el mes de diciembre.
Agregó que otro elemento que se observa es que la capacidad de los albergues se encuentra rebasada, “es ahí donde conminamos a todos los sectores para apoyar y generar condiciones dignas y humanas para estas personas”.
Anunció que a su regreso a la Ciudad de México preparará un informe sobre la situación que se vive en los albergues ubicados en ese punto fronterizo y reiterará las propuestas que le presentó al presidente Enrique Peña Nieto los pasados 28 de noviembre y 7 de diciembre, “ahora con más elementos para que se impulse una estrategia de Estado que atienda la migración”.
Adelantó que propondrá al gobierno federal que refuerce el diálogo con sus similares de Centroamérica y Haití para que evalúen las causas de la migración, a fin de que sean atendidas en cada una de las regiones.
Además, pondrá en la mesa el que se enlacen las ciudades fronterizas estadounidenses y mexicanas para que la migración sea atendida como un fenómeno mundial y no como un problema; ampliar y vigilar la correcta aplicación de recursos destinados a los albergues, dotar a estos centros de especialistas en psicología, medicina y asistencia legal para dar apoyo efectivo a los migrantes.
Resaltó, además, la necesidad de que las ciudades fronterizas mexicanas se preparen y reciban apoyo de la federación para hacer frente a la actividad adicional que registran con la permanencia temporal o permanente de migrantes deportados de EU; otra medida, abundó, es crear una línea de atención a migrantes.
Para finalizar, hizo énfasis en que es una prioridad dotar a estos centros de recursos económicos y añadió que la Ley de Derechos establecía un presupuesto del 60 por ciento para atender el creciente flujo migratorio y 40 por ciento para fomento al turismo, sin embargo, ahora la ecuación es de 80 por ciento para turismo y el resto para atender el flujo migratorio.
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