Por. Redacción/

Leonardo Jesús Méndez Villamil no porta un letrero en la frente que acredite su vocación de servicio a través de la ciencia. Sube una cuesta rumbo a la Facultad de Ciencias (FC), pedalea con voluntad la bicipuma, lleva abierto el cierre de su mochila como si a su paso recolectara el conocimiento en la espalda.

El alumno del segundo semestre de la licenciatura en Matemáticas es uno de los dos estudiantes de la UNAM electos por el Gobierno de la República, a través del Instituto Mexicano de la Juventud y las secretarías de Relaciones Exteriores, Educación Pública y Economía, y apoyado por el Gobierno de Suiza y una empresa privada, para acudir al III Encuentro de Jóvenes de la Alianza del Pacífico 2018, en Cali, Colombia, del 28 al 30 de junio próximos.

El encuentro se da en el marco del mecanismo de integración regional “Alianza del Pacífico”, en el que el alumno de 18 años llevará la co-representación de México en el rubro de “Jóvenes Agentes de Cambio”. Ahí presentará el proyecto de su organización, denominada Iu Kuniuchu Ja-Kui (Amor verde, en mixteco).

Amor verde

En Iu Kuniuchu Ja-Kui Leonardo ha vertido su vocación por la ciencia, el desarrollo y la transformación del país.

“Tengo disposición por ayudar a México, por intentar un cambio; ése es el principal motivo por el que hicimos Iu Kuniuchu Ja-Kui, que pretende disminuir la deserción escolar en la región mixteca de Oaxaca, salvaguardar especies de plantas y crear empleos en el campo”, dijo.

La organización, explicó, fue cofundada con dos estudiantes extranjeros: Sophie Nicholson y Tarek Sherif, que conoció en “Students on Ice Expedition 2017”, un viaje por el ártico (Canadá y Groenlandia), al que acudió como representante de Latinoamérica y por el cual se hizo acreedor al Premio Municipal de la Juventud de Tehuacán, Puebla, 2017, en donde residió un tiempo.

El objetivo es que a los jóvenes de la región mixteca, en particular de Huajuapan de León, se les instruya y apoye para cultivar y comerciar plantas, cosechar alimentos y vender sus productos para que puedan continuar sus estudios, detalló.

Con esto, además de cuidar a las especies, se cuida a la naturaleza y se contribuye a crear empleos, y todo bajo la premisa de que quienes participen no abandonen la escuela. El proyecto ya se lleva a cabo con algunos casos de éxito: en la región se han sembrado más de mil plantas de 19 especies para su cuidado.

Méndez Villamil, quien fue finalista en la Olimpiada Nacional de Astronomía 2017, y en 2015 y 2016 obtuvo el segundo sitio en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, también pretende ayudar a otros jóvenes a crear ciencia.