Por: Redacción/
El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) es el único en el país que cuenta con espacios terapéuticos psicológicos que tienen un doble impacto, pues de manera simultánea sirven de apoyo para los juzgadores y a las personas que tienen acercamiento con el área, señaló la coordinadora de Intervención Especializada para Apoyo Judicial, Mariana Ortiz Castañares.
“Se ha hecho mucho esfuerzo por tener estos espacios que antes no se tenían, hoy en día, el área de psicología tiene un peso importantísimo en los juzgadores como apoyo; pero más allá del área jurisdiccional, que es a quienes atendemos, lo más importante, el impacto más interesante de que se cuente con este apoyo psicológico, es que nosotros hacemos un trabajo muy fino hacia las familias que acuden con problemas muy diversos”, aseguró.
Añadió que todas las áreas que conforman la coordinación fueron diseñadas de acuerdo a las necesidades y a la especificidad de las actividades que se llevan a cabo. “En el área de psicología tenemos un espacio diseñado con medidas estándares internacionales para generar un espacio agradable, un espacio confortable terapéuticamente hablando”, manifestó.
La coordinadora mencionó que el área de evaluación fue diseñada para que las personas puedan concentrarse y tener todos sus sentidos en las pruebas periciales que requieren toda la atención; en tanto, los centros de convivencia familiar han sido sometidos a una reingeniería para recibir a las familias que asisten.
Mariana Ortiz Castañares detalló que en su área se realizan más de 180 exámenes psicológicos por instrucción judicial, las cuales funcionan como pruebas para los juzgadores; no obstante, señaló que no son determinantes para la emisión de sentencias.
La coordinadora destaca que el personal que labora en su área es capacitado anualmente para garantizar que los servicios que brindan sean adecuados; para ello diseñan programas y, a través del Instituto de Estudios Judiciales, se ofrecen los cursos de actualización y especialización. Además, de que la mayoría de los profesionales continúan su preparación académica de forma individual.
A la par de las capacitaciones, la Coordinación de Intervención Especializada para Apoyo Judicial mantienen vínculos con otras instituciones que favorezcan la labor diaria. “Tenemos un convenio, que acabamos de firmar recientemente el año pasado, este convenio tiene que ver con la creación de una batería de pruebas para medir las interferencias parentales. El convenio lo firmamos con la máxima casa de estudios, la UNAM, a través de la Facultad de Psicología y también con la licenciatura de Ciencia Forense”, detalló Ortiz Castañares.
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