Por: Roberto Barco Celis
El Poder Judicial ha sido sensible a lo que pasa más allá de su propio ámbito, a la sociedad viva que no sólo clama por sus derechos sino que los reclama buscando los cauces institucionales idóneos, y por ello debe seguir siendo referente en la conquista de derechos de las mujeres en Latinoamérica y el mundo, afirmó el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar.
Al participar en la ceremonia de premiación del concurso de documental, reportaje y ensayo ‘Género y Justicia 2015’, el presidente del Consejo de la Judicatura Federal señaló que hay que reconocer la amplísima participación de mujeres mexicanas en Beijing y en Beijing más 20, donde se hizo una seria evaluación de los avances en esos objetivos y de lo que falta por alcanzar. Fue muy importante también la presencia de México en la Conferencia Internacional sobre población y desarrollo de El Cairo en 1994.
Sostuvo que hay “muchos avances en los derechos fundamentales para las mujeres se desprendieron de ahí, particularmente lo relacionado con los derechos sexuales y reproductivos, tema que abordó la ganadora del reportaje premiado hoy, enfocado a los derechos de las niñas”.
Mencionó que los legisladores han buscado dar soluciones y hacer previsiones de manera general, “mientras que los jueces tenemos la gran oportunidad de revisar los casos concretos e impartir justicia. Y ello nos ha permitido conocer de situaciones en donde se ve claramente la situación de vulnerabilidad que la mujer enfrenta por asimetrías sociales ancestrales y es nuestro deber eliminarlas cuando contamos con elementos para ello.
“Hay que recordar siempre que en México, además, no podemos hablar de las mujeres en general sin advertir que hay mujeres que se encuentran en posiciones de mayor desventaja como las obreras, las campesinas, las indígenas, las trabajadoras domésticas, las mujeres migrantes o las que resienten los efectos de la migración masculina; y desde luego de mujeres que por su edad o por la presencia de alguna discapacidad son objeto de doble y hasta triple discriminación.
“Es necesario poner los ojos y la máxima atención en todas estas situaciones que marcan la diferencia entre la exclusión y la inclusión, entre la visibilidad y la invisibilidad, entre la igualdad real y la discriminación”.
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