Por: Redacción/
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) entregó, por segundo año consecutivo, el Reconocimiento Alfonso García Robles para Labores Destacadas en Favor de Personas Migrantes 2018, a cuatro personalidades que han sobresalido por la defensa, promoción, protección y garantía de los derechos humanos y civiles de migrantes en Estados Unidos.
El rector Enrique Graue Wiechers impuso la medalla, y dio el diploma del galardón que lleva el nombre del “Padre del desarme nuclear en América Latina” y Premio Nobel de la Paz 1982, a Isabel García, codirectora de la Coalición de Derechos Humanos de Arizona; a Antonia Hernández, presidenta y directora ejecutiva de la California Community Foundation; yal padre Pedro Pantoja Arreola, fundador de la Casa del Migrante de Saltillo, que aloja a cerca de seis mil personas al año.
También se reconoció a Jesús “Chuy” García, quien será el primer representante federal del estado de Illinois de origen mexicano en el Congreso de Estados Unidos. Su distinción fue recibida por el director de la sede de la UNAM en Chicago, Javier Laguna.
A nombre de la Universidad Nacional, el coordinador de Humanidades, Alberto Vital Díaz, subrayó que el reconocimiento busca hacer visibles los esfuerzos y narrativas de vida dedicadas a que conceptos como derechos humanos, desarme y migración se vean cobijados por leyes, que permitan dar nombre y marcos de referencia a numerosas circunstancias humanas.
“Terminamos pareciéndonos un poco a aquellas palabras que más pronunciamos. En los últimos 50 años se han pronunciado cada vez más: derechos humanos y migrantes; repitámoslas muchas veces más en acciones positivas como las que ustedes realizan, con especial énfasis en mujeres, niños y adultos mayores migrantes”, aseveró.
Asimismo, indicó que a lo largo de la historia de la humanidad, y fruto de la migración humana, existen manifestaciones de cultura, educación, conocimiento, ciencia y artes. Por ejemplo, Leonardo da Vinci recorrió 100 sitios en busca del intelecto y la sensibilidad; René Descartes escapó de Francia a Holanda para escribir el “Discurso del Método”; y Vincent van Gogh fue de Holanda a Francia para refundar la pintura universal.
En el auditorio Doctor Jorge Carpizo, Antonia Hernández, quien habló a nombre de los galardonados, indicó que hoy México tiene la oportunidad de ser ejemplo del trato que se debe dar a quienes dejan su nación no por gusto, sino por necesidad, con las caravanas de migrantes en Tijuana.
“Pido que recordemos la humanidad que García Robles nos enseñó. No somos una nación rica, pero tampoco tan pobre. Tenemos que compartir esos recursos porque este país ha enviado a muchas personas a otras partes del mundo, especialmente a Estados Unidos”, remarcó.
Previamente, el coordinador del Programa de Apoyo a los Mexicanos en el Extranjero, de la Universidad Nacional, Jorge Madrazo Cuéllar, destacó que la migración está presente en todos los continentes y crece rápidamente. El año pasado, subrayó, hubo 258 millones de migrantes en el planeta, que representan el 3.4 por ciento de la población total. De ellos, 58 millones están en América del Norte, y 50 millones específicamente en Estados Unidos.
La migración, insistió, ofrece posibilidades de afianzar el progreso de las naciones, contrario a la construcción de muros y mensajes de odio que hay en diferentes partes del orbe.
Quienes creemos que la migración segura, ordenada y regular (como la ONU ha propuesto) es un impulso para el progreso, estamos llamados a trabajar con las comunidades para hacer conciencia de que no es moral exigir lo que no se está dispuesto a dar, expresó.
En tanto, Luis de la Barreda Solórzano, director del Programa Universitario de Derechos Humanos, expuso que los galardonados son ejemplo del “don de la humanidad”, prodigado con los mexicanos que migran en busca de una mejor calidad de vida.
“Tener humanidad es sentir lo común en lo diferente, aceptar lo distinto, rechazar la repulsión a lo extraño, experimentar repugnancia al ver sufrir a un semejante… Esa virtud se enlaza con la universalidad de los valores, comprendida como reciprocidad generalizada y cuyo código más explícito son los derechos humanos”.
A la ceremonia de premiación asistieron el secretario permanente de la Junta de Gobierno de la UNAM, José de Jesús Orozco; la titular de la Oficina de la Abogacía General, Mónica González Contró; la tesorera, Guadalupe Mateos Ortiz; el presidente de la Fundación Diplomática Alfonso García Robles, Rafael Medina, así como integrantes del cuerpo diplomático de Ecuador y Jamaica en México, entre otros.
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