Por: Redacción

Especialistas del Marine Mammal Center (CMM) y del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) informaron a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) que el diagnóstico presuntivo sobre la muerte de 3 Vaquitas Marinas (Phocoena sinus) es posible enmallamiento, ya que en los cadáveres se observaron escoriaciones y laceraciones provocadas al parecer por cuerdas o hilos.

La PROFEPA había solicitado el apoyo a estos institutos de investigación luego de haber localizado a 2 vaquitas marinas muertas, 1 en el mar y 1 varada en la playa, en el Alto Golfo de California. Por lo cual se practicaron las necropsias en las instalaciones del Parque Zoológico Internacional de Tijuana.

Un tercer ejemplar fue ubicado el dia de ayer 24 de marzo de 2016, en las inmediaciones del lugar conocido como “El Machorro”, un kilometro al norte del Puerto de San Felipe, Baja California.

Después de que fueran localizados los restos de 3 ejemplares de vaquita marina, (Phocoena sinus) en las inmediaciones de la Bahía de San Felipe BC, personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), en coordinación con un equipo de especialistas en mamíferos marinos de los Estados Unidos de América, realizaron la necropsia correspondiente a estos 3 cetáceos.

Los trabajos clínicos de investigación se llevaron a cabo en las instalaciones del Parque Zoológico Internacional A.C., y de la clínica veterinaria de Alexander Brown, ubicadas en la ciudad de Tijuana, Baja California.

Uno de los ejemplares pesaba 29.800 kilogramos, media aproximadamente 1.27 metros y era una hembra; el, se trataba de un macho con un peso de aproximado de 32 kilos y 1.35 metros de largo, y por ultimo un tercero, macho adulto de 1.47 metros de largo por 0.36 metros de ancho con un peso de 41.7 kilogramos del tercer ejemplar .

Durante la necropsia, se realizaron tomas radiológicas de uno de los cráneos del cadáver de vaquita marina; además se tomaron muestras dobles de tejidos, una de ellas será analizada en el Laboratorio de Sausalito, California, por especialistas a cargo de Lorenzo Rojas como responsable.

El resto de las muestras serán enviadas por PROFEPA, a instituciones de investigación tales como la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) para realizar análisis genéticos, biotoxinas patologias toxicológicas, edad, parasitologia y de metales pesados.

En el análisis minucioso y avanzado de los científicos, manifestaron preliminarmente que ambos especímenes prestaron evidencias de escoriaciones y laceraciones provocadas al parecer por cuerdas o hilos similares a enmallamientos.

Mencionaron que uno de los cadáveres presentaba un hematosis a la altura de la cabeza y alrededor del cuello hasta la aleta pectoral derecha, posiblemente provocada por una cuerda enredada en esa parte, y en el tercer ejemplar se encontraron evidencias externas en cuello, rostro, aletas, pectorales, cola y torax consistentes en: laceraciones, cortes, impresiones o marcas de cuerdas, soga y redes, ademas de hematomas externos.

Los resultados definitivos de este diagnóstico presuntivo realizado a través de auscultación corporal y necropsia, serán dados a conocer a más tardar la próxima semana, una vez que los especialistas lleven a cabo las pruebas correspondientes y rindan el informe final; del cual se prevé que se cuente con las causas de muerte de esos cetáceos.

Por el momento los restos fueron depositados en el congelador de la Delegación en Baja California, para estudios posteriores.

Ante la posibilidad de que estos ejemplares murieron enmallados o a causa de actividades antropogénicas, la autoridad intensificará las acciones de inspección y vigilancia nocturnas, marítimas y terrestres, sobre todo en los sitios detectados como tiraderos de redes totoaberas; además de buscar un acercamiento con el gremio pesquero a fin de sensibilizar a sus miembros de abstenerse de realizar actividades de pesca furtiva y con artes prohibidas.