Por: Redacción/
La mayoría de las obras públicas que realiza el gobierno de la Ciudad, son impugnadas por los ciudadanos porque generan un gran descontento social, son privatizadoras y violatorias de los derechos humanos, reprochó el diputado David Cervantes Peredo al secretario de Obras y Servicios local, Edgar Tungüí Rodríguez.
Durante la comparecencia del funcionario, el legislador de Morena destacó que tanto los Centros de Transferencia Modal, como las obras del Metrobús, el Tren Interurbano, el Deprimido Mixcoac, entre otras, fueron objetadas por los habitantes de la ciudad, quienes se ampararon y presentaron quejas por los referidos proyectos.
Lo anterior, explicó Cervantes Peredo, se debe a que el gobierno de Mancera prioriza el negocio sobre el bienestar de los capitalinos, e incluso, viola los derechos humanos de quienes vivimos en la Ciudad de México, señaló.
El diputado reclamó que el gobierno central vea en las necesidades de los ciudadanos, un nicho de oportunidad para los negocios, pues señaló que la inversión privada necesariamente busca ganancias.
Ejemplo de ello es la empresa que se dedica a brindar mantenimiento al Circuito Interior, la cual tiene exclusividad para incidir sobre esa vía de circulación. Se trata, expuso, de un proyecto que compromete los recursos de la ciudad por muchos años y, por ende, le genera obligaciones a la capital.
Respecto del sismo ocurrido el pasado 19 de septiembre, Cervantes Peredo sugirió que sea el Instituto para la Seguridad de las Construcciones, quien revise los inmuebles que resultaron dañados y entregue el dictamen correspondiente para dar certeza a los afectados.
Lo anterior es necesario porque hasta el momento no se conoce el número de familias afectadas en cuanto a viviendas, pero tampoco, en cuanto a servicios, recalcó.
Ante ello, el diputado de Morena propuso crear un modelo de gestión especial para comunidades y personas afectadas por el sismo, cada persona, dijo, debe conocer su situación y tener los documentos que lo acrediten para poder hacer exigible su derecho a la atención, concluyó.
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