Por. Redacción/

Los investigadores “hemos trabajado conjuntamente para encontrar opciones en la impartición regular de los cursos”, luego de que cerca de 60 laboratorios de docencia de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud (CBS) resultaron afectados por el sismo de septiembre de 2017, apuntó la doctora María del Carmen Fajardo Ortiz, jefa del Departamento de Biotecnología de la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Con un total de cinco departamentos implicados, el plantel académico emprendió de inmediato el acondicionamiento de espacios alternativos al edificio “S” –el único de esta casa de estudios que resultó con daño estructural– en el “R” y el anexo al “AS”, cuyos grupos científicos decidieron compartir sus instalaciones para el desarrollo de prácticas en cada sitio.

La División de Ciencias Básicas e Ingeniería (CBI) puso también a disposición algunas áreas, aun cuando no cuentan con lo necesario para la realización de estudios de microbiología o bioquímica, pero permiten las actividades virtuales con el uso de recursos digitales y multimedia.

Las licenciaturas en Ingeniería Bioquímica Industrial y en Ingeniería de los Alimentos –que requieren gran cantidad de material, tanto reactivos como cristalería– cuentan sólo con algo depositado en el almacén, lo que ha mermado la labor trimestral.

A partir del 20 de septiembre la dirección, la secretaría y las áreas de servicios social y escolar de CBS fueron reubicadas en el edificio “W”, en tanto que los docentes de posgrado continuaron sus investigaciones en sedes de los institutos Politécnico Nacional (IPN) y Nacional de Cardiología (INC), y debieron trasladar parte de los equipos a su resguardo.

La doctora Fajardo Ortiz precisó que están en construcción aulas provisionales, algunas donadas por la Unidad Azcapotzalco, que recién terminó los procesos de rehabilitación y la reestructuración del edificio “G”.

“Estamos en pláticas con el Instituto de Energía y Calentamiento Global –con el que la UAM tiene un convenio que vencerá en julio de 2018– para que pronto contemos con 12 laboratorios más de diferentes tamaños que serán desocupados y nos dejarán el mobiliario, aunque dos de ellos ya fueron reasignados”.

La doctora María del Carmen Navarro Maldonado, jefa del Departamento de Biología de la Reproducción, mencionó que las actividades suspendidas en su área corresponden al Laboratorio Integral, adscrito al Tronco General, lo que afectó a más de 50 por ciento” de dicha instancia académica.

Al menos otros tres espacios fueron removidos a la planta baja del edificio “R” y algunos más se localizan de momento en las bodegas y en el Laboratorio de Manejo de la Reproducción de la Unidad Xochimilco, este último para atender aspectos sobre reproducción animal asistida.

La situación en la UAM se replica en otras instituciones que efectúan investigación y dan servicio en México, ante lo cual “estamos creando estrategias y buscando opciones de solución a todas nuestras necesidades inmediatas”.

La doctora María del Rocío Torres Alvarado, jefa del Departamento de Hidrobiología, detalló que éste fue el menos comprometido, ya que únicamente era asiento de cubículos y laboratorios de dos profesores, sin embargo el sismo impactó en materia de docencia debido a la cancelación de la unidad de enseñanza aprendizaje Análisis de Contaminantes, porque no se pudieron rescatar los reactivos del edificio “S”.

Además suspendió por completo el Laboratorio Divisional de Biología Molecular, que otorga servicio a todas las licenciaturas, maestrías y doctorados, e incluso a agencias externas, pero “estamos por acondicionar otro lugar en el “R”, donde trasladaremos la mayor parte del mobiliario y nuestra meta es comenzar a funcionar de inmediato”.

Aunque “somos uno de los Departamentos menos numeroso en matrícula, a nivel científico representamos una parte esencial” y, con la finalidad de recuperar otros ejercicios, algunos profesores optaron por el trabajo de campo, recibiendo el apoyo de colegas que hicieron demostraciones sobre acuicultura y ecotoxicología en la planta experimental de Producción Acuícola de la Unidad Iztapalapa.

Torres Alvarado agregó que los cubículos departamentales están siendo compartidos, por ejemplo, una sala de juntas está disponible para realizar exámenes de grado y otras han sido reinstaladas de acuerdo con la afinidad de las líneas de estudio.

El Departamento de Ciencias de la Salud también sufrió afectaciones y la Coordinación de laboratorios ocupará el edificio AS provisionalmente, cuatro laboratorios de diez metros cuadrados cada uno serán habilitados y algunas bodegas acondicionadas para su uso como laboratorios de entre 12 y 15 metros cuadrados.

Las académicas indicaron que se ha dado prioridad a los grupos de investigación más grandes con nivel de compromiso sostenido con el exterior.