Por: Vicente Flores Hernández
De acuerdo con la Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), el número de lecherías Liconsa que operan en el país creció de 8 mil 127 centros de distribución a 9 mil 790, de los cuales, 7 mil 204, se encuentran en los municipios con mayores carencias alimentarias.
En 2015 Liconsa alcanzó 6 millones 380 mil beneficiarios, apenas tres años antes este número era de poco más de 5 millones. Un 30 por ciento del padrón se ubica en comunidades indígenas marginadas de Michoacán, Sonora, Chihuahua, Oaxaca y Guerrero, la gran mayoría habitantes de municipios contemplados en la Cruzada Nacional Contra el Hambre.
El director general de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez Puga informó que en los próximos meses se desplegará un programa que permitirá llevar leche barata a 150 municipios en las tres entidades con mayores índices de pobreza extrema.
En este contexto, Ramírez Puga destacó la posibilidad de que el litro de leche Liconsa pueda ofrecerse hasta en un peso, en beneficio de cerca de 73 mil personas que viven en condiciones de pobreza extrema en Oaxaca, Guerrero y Chiapas.
Liconsa, organismo desconcentrado de Sedesol que en el 2014 cumplió 70 años, adquiere 778 millones de litros de leche a productores mexicanos, es decir, lo que representa que el 80 por ciento de toda la leche que distribuye la paraestatal es nacional.
En 2016 Liconsa reforzará su presencia en zonas marginadas al abrir nuevos centros de distribución en beneficio de los sectores con mayores carencias alimentarias.
En Oaxaca, Guerrero y Chiapas que son entidades con los mayores índices de pobreza, el precio del litro de leche se mantuvo en 4.50 pesos, un peso menos que en el resto del país.
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