Por: Redacción

El GPPRD demandó al gobierno federal dejar de lado su complicidad con Javier Duarte de Ochoa, asumir plenamente sus responsabilidades en el quebranto de Veracruz y poner en marcha todas las medidas necesarias para resarcirle todos los recursos sustraídos, pues tiene años que sabe del atraco a ese estado.

En conferencia de prensa encabezada por Francisco Martínez Neri y Jesús Zambrano Grijalva, respectivamente coordinador y vicecoordinador del GPPRD, los diputados Leonardo Amador Rodríguez y Julio Saldaña Morán precisaron que prueba de la complicidad del gobierno federal es que incluso se interpusieron demandas penales ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra la administración de Duarte sin que hasta el momento ésta haya actuado.

“El gobierno federal sabe y sabía perfectamente lo que pasaba en Veracruz, y si no intervino ni interviene es porque tiene cola que le pisen”, puntualizó Amador Rodríguez, en tanto Saldaña Morán recordó que la Auditoría Superior de la Federación (ASF), órgano fiscalizador de la Cámara de Diputados, ya presentó más de 30 denuncias ante la PGR, las cuales ésta ignoró completamente.

El problema venía escalando desde hace años –reiteró Leonardo Amador-, y como el gobierno permaneció omiso en sus obligaciones, hoy tenemos el Palacio de Gobierno tomado por presidentes municipales que, por el incumplimiento de la administración estatal en la entrega de recursos federales, no tienen ni para pagar nómina, seguridad, obras de infraestructura y servicios básicos.

Resulta que el mismo Secretario de Finanzas –dijo- reconoce que ocupó el dinero federal para otras cosas. Esto habla de una gran corrupción de las actuales autoridades que gobiernan Veracruz, pero el gobierno federal ya lo sabía. Lo peor que puede hacer ahora es mantener su complicidad con el actual gobierno estatal.

Julio Saldaña Morán destacó que la administración federal cuenta con capacidad financiera para ir al rescate de Veracruz, como lo prueba el hecho de que la actual Presidencia de la República, por ejemplo, de continuo excede sus propios gastos suntuosos e innecesarios, a pesar de ello no le alcanza y, de manera discrecional, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le asigna más, como los destinados al pago de propaganda en medios de comunicación.

Por ello criticó las declaraciones del titular de la SHCP, José Antonio Meade Kuribreña, según las cuales dicha dependencia no puede apoyar a Veracruz y recomienda a sus autoridades pedir prestado, cuando claramente esta dependencia fue cómplice del quebranto a la entidad al no denunciar las irregularidades del gobierno estatal con las transferencias federales.

En el mismo tono, Agustín Basave Benítez señaló que la complicidad del gobierno federal y su partido –el PRI- con Duarte de Ochoa fue tal que incluso lo dejó escapar dos veces: la primera hace seis años y la segunda hace unos días. En ambos casos, hizo nada para detenerlo y encarcelarlo. Al contrario, lo dejaron saquear impunemente al estado.

“El gobierno federal no puede evadir su responsabilidad de lo que pasó en Veracruz. Es su partido, el que encabeza la Presidencia de la República y que solapó a Javier Duarte durante seis años, el que permitió este obsceno saqueo al estado. Ahora no pueden hacerse a un lado y decir que es un problema de Veracruz. Eso no puede ser; es un intento del PRI-gobierno de evadir su evidente responsabilidad”, puntualizó.

Jesús Zambrano Grijalva apuntó que fue tal el desfalco que hasta municipios gobernador por el PRI fueron perjudicados. Por lo mismo criticó a diputados federales de ese partido por descalificar a los alcaldes que exigen resarcimiento de los recursos desviados, pues implica darle la espalada a millones de veracruzanos y una complicidad tácita de esos diputados con la malversación.

Demandó a la PGR ir hasta las últimas consecuencias en las denuncias que le presentó la ASF, investigar dónde están los recursos sustraídos y si fueron usados para enriquecimiento personal de Duarte y sus colaboradores, o para financiar campañas electorales de su partido, el PRI.

Por último, Francisco Martínez Neri destacó que este tipo de desfalco no es ajeno a las altas esferas políticas del país, por lo que obviamente Duarte de Ochoa no actuó solo, sino con la complicidad de quienes hoy gobiernan a nivel federal.

Consideró una aberración que Meade se desentienda del problema porque “estamos hablando de un quebranto mayúsculo”.

Desde la Cámara de Diputados –dijo- “vamos a seguir los procedimientos que sean necesarios; sabemos, desde luego que, en el caso concreto del juicio político contra Duarte ya viene siendo corto. Es decir, el juicio político ya daría la inhabilitación de este señor, pero este señor no sólo debe ser inhabilitado, sino encarcelado”.

Como parte de las medidas para resarcir el daño, consideró necesario el aseguramiento de bienes a los responsables. “A mí me parece que hay bienes suficientes como para pagar eso y más, de modo tal que ésa podría ser una de las acciones que podríamos seguir”.