Por: Redacción
La violencia e inseguridad en el país han alcanzado niveles preocupantes, particularmente en entidades, como el Estado de México, donde la población vive amedrentada y en situación de peligro constante, mientras las autoridades poco o nada hacen por atender un problema que genera graves efectos sociales y económicos, afirmó el coordinador de los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), Fernando Herrera Ávila.
“Los datos disponibles, tanto oficiales, como de organizaciones sociales, muestran cómo la entidad mexiquense supera a todos los estados del país, incluida la Ciudad de México, en hechos delictivos diversos ocurridos en los años recientes”, dijo.
Resulta revelador, indicó, que el 91 por ciento de las mujeres mexiquenses se sientan inseguras por la amenaza de ser víctimas de diferentes delitos, como la violación, el robo o asalto en las calles y en el transporte público, entre otros, de acuerdo con los datos más recientes de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Organizaciones sociales han calificado al Estado de México como la “capital” de los feminicidios del país, ya que ha superado las cifras de asesinatos de mujeres cometidos en Ciudad Juárez, Chihuahua, observó.
De acuerdo con el Observatorio Ciudadano en contra de la Violencia de Género, Desaparición y Feminicidio en el Estado de México (Mexfem), en 2016 se cometieron 263 presuntos feminicidios, 39 de los cuales ocurrieron en Ecatepec, municipio de donde es originario el actual gobernador del estado, refirió.
En las primeras semanas de este año, la organización detalló que han ocurrido 17 muertes violentas de mujeres, sobre todo en Ecatepec, Ixtapaluca y Nezahualcóyotl, agregó.
Herrera Ávila comentó que otros datos ilustrativos sobre la gravedad del tema son los que aporta el Sistema Nacional de Seguridad Pública, los cuales muestran que en 2016 se denunciaron ante las agencias del Ministerio Público un millón 603 mil 801 delitos del fuero común, de los cuales 221 mil 760 correspondieron al Estado de México, cifra superior a la reportada por cada uno del resto de los estados.
Para enero de 2017, esta incidencia nacional fue de 142 mil 507 casos, de los cuales 21 mil 925 corresponden a la entidad mexiquense, nivel nuevamente superior al de las otras entidades, expuso.
El senador panista citó también el reporte de 2016 del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), en el que el Estado de México aparece dentro de los cinco primeros lugares de los 10 delitos considerados de alto impacto, cometidos entre diciembre de 2015 y noviembre de 2016, como: homicidio doloso, homicidio culposo, secuestro federal y común, extorsión, robo con violencia, robo de vehículo, robo a casa habitación, robo a negocio, robo a transeúnte y violación.
En estos 10 delitos, la entidad ocupó el primer lugar en cinco de ellos: homicidio doloso, extorsión, robo con violencia, robo de vehículo y violación.
Los anteriores datos, dijo el senador panista, son apenas un botón de muestra de la realidad que subyace en la entidad, donde los ciudadanos ven a un gobernador distraído y preocupado por su futuro político y el de su partido, dejando a un lado los problemas que afectan la vida cotidiana de las personas que son atacadas por la delincuencia, de las familias a quienes violentan sus casas, de los trabajadores que son víctimas de asaltos en el transporte público y de los comercios y empresas acosadas por las bandas criminales.
“Los senadores de Acción Nacional vemos con preocupación estos hechos, resultado de una pésima gestión del actual gobierno priista, cuyo titular dedica su tiempo al proselitismo político, con la entrega facciosa de recursos sociales, en lugar de velar por la seguridad de las familias mexiquenses”, puntualizó.
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