Por: Redacción/

Uno de los derechos más anhelados y negados por el sistema patriarcal es una vida libre de violencia de género, como evidencia el aumento en los casos de ataques contra mujeres en el ámbito familiar durante el confinamiento obligado por la pandemia del COVID-19, aseguró la doctora Iris Rocío Santillán Ramírez, defensora adjunta de la Defensoría de los Derechos Universitarios de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Ante esa realidad, “el gobierno federal emitió sólo una pésima campaña –Cuenta hasta diez– que lo único que mostró es que desconoce la manera como se practica este tipo de agresiones que puede terminar en feminicidio” y, debido a que no existe un estereotipo único de mujer, “cada una tiene una experiencia distinta”.

Vale destacar que se han ganado algunos escaños en los sectores de la educación y la política “en la tarea de conocer y hacer visibles nuestros derechos, gracias al trabajo arduo de aquellas que nos antecedieron”.

La comunidad de la Casa abierta al tiempo cuenta con mecanismos para ejercer los derechos universitarios y evitar la vulnerabilidad, ya que el 18 de diciembre de 2020 fueron aprobadas las Políticas Transversales para Erradicar la Violencia por Razones de Género y se trabaja, tanto en un Código de Ética dirigido al personal académico y administrativo como en una reforma integral para que la legislación institucional observe la misma perspectiva.

De hecho, “la comisión encargada –de la cual soy asesora– cuenta ya con un avance importante y espero que siga habiendo disposición y voluntad política para avanzar en el proceso de sensibilización del personal académico y administrativo”.

La criminóloga feminista subrayó que “tenemos el enorme compromiso de mover las estructuras –familia, escuela, religión, entre otras– que han encasillado o estereotipado a la mujer, así como de contar con lineamientos de igualdad que permitan eliminar este tipo de agresiones y pugnen por la igualdad de oportunidades sin importar sexo, color de piel o discapacidad”.

Esa es la razón por la que muchas conmemoran el Día Internacional de la Mujer, que este año fueron encapsuladas en el centro de la Ciudad de México, “en un acto de criminalización de la protesta social que no se había visto en ninguna otra marcha”.

Si bien las reformas legales emprendidas en el país han incidido en una mayor participación de ellas en la política, todavía persisten expresiones de violencia por razones de género, sostuvo la académica del Departamento de Derecho de la Unidad Azcapotzalco.

El informe del Estado Mundial de la Población publicado en 2020 por el Fondo de Población de la Organización de las Naciones Unidas (UNFPA), en el orbe faltan 142 millones de mujeres, pues por cada cien niñas nacen 106 niños y fallecen más en sus primeros años de vida, además de que en países –China entre ellos– se practican “feticidios femeninos”.

En el ámbito nacional, “la clase política permite que personas como Félix Salgado Macedonio sean postulados para competir por una gubernatura, a pesar de contar con cinco denuncias por violación, o que el escritor Andrés Roemer –con al menos 60 acusaciones de agresión sexual– mantenga la protección del propietario de la cadena de televisión donde labora”, concluyó.

La doctora Santillán Ramírez participó en el Ciclo de conferencias: De mujeres, para mujeres: semana de la mujer a un año del 8-M y del 9-M. Hablemos de los derechos de las mujeres.