Por: Redacción/

El Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (GPPRD) en la Cámara de Diputados planteó que el “Fondo Especial para la Reconstrucción” de edificios e infraestructura dañados por los fenómenos naturales ocurridos en el país, deberá ser de entre 45 a 50 mil millones de pesos, obtenidos no sólo de las asignaciones a los partidos políticos sino que también habrá que ajustar los presupuestos de los poderes Ejecutivo y Judicial, por lo que apeló a la sensibilidad y responsabilidad de todos los grupos parlamentarios para apoyar dichos recortes.

Jesús Zambrano Grijalva, Vicecoordinador del GPPRD, aclaró que las adecuaciones no deben afectar programas de carácter social sino fortalecerlos, a la vez que enfatizó la necesidad de escuchar la voz de la gente que pugna por que ese Fondo Especial sea supervisado y fiscalizado por organismos de la sociedad civil y evitar que los recursos se vayan a parar a “a la bolsa de la corrupción” o sean utilizados con propósitos electorales de cara al 2018.

Adicionalmente, el legislador federal hizo un llamado abierto al empresariado del país -especialmente las grandes empresas y corporaciones que hacen negocios con el gobierno y se benefician del modelo económico que tenemos- para que también hagan su aportación en este fondo de manera que sea suficiente para atender las necesidades de la población.

“Nadie aquí puede ni debe quedarse al margen de este gran esfuerzo nacional porque no se vale que solamente se le exija al gobierno o a los partidos políticos desde el ámbito de la empresa privada –especialmente las grandes corporaciones- y no se les vea activamente participando, incluidos por cierto, los bancos que han tenido en los últimos años (según sus propios informes) unos de los más altos rendimientos a partir de la especulación, de todo el manejo que hacen con los ahorros de la gente y del país”, señaló.

“Aquí todo mundo debe asumir la parte de responsabilidad que le corresponde y todos los órganos del Estado mexicano deben contribuir a que podamos tener el fondo más grande que hayamos configurado en las últimas décadas para atender estos asuntos que hoy reclama el país”, puntualizó.

Zambrano Grijalva fue enfático al señalar que “se ha hablado con especial atención del papel de los partidos políticos, los recursos que se les otorgan y que son poco más de seis mil millones de pesos en su conjunto; pero poco se ha puesto atención en los demás rubros pues es obvio que seis mil millones –si se aportara todo o una parte- no alcanzarán para el tamaño de la emergencia que todavía no termina de cuantificarse; pero hay que empezar el ejercicio y aquí, por ejemplo, el Poder Judicial es uno de los que tendrán que sufrir recorte del proyecto de Presupuesto de Egresos (que ya está en poder de la Cámara), en lo que se refiere a gasto corriente, sueldos y prestaciones de ministros, altos funcionarios, magistrados, jueces, etcétera”.

“En los ramos administrativos –dijo- igual: En lo que son los salarios de los mandos altos y medios, los servicios personales, todo lo que tiene que ver con gastos que pueden y deben ser asumidos por los propios funcionarios de la alta administración pública federal como gasto de celulares, seguros médicos mayores”.

“El Gobierno Federal mismo –añadió- meterle tijera, entre otras cosas, al rubro de comunicación social que trae una presupuestación (para 2018) de 3 mil 500 millones de pesos; pero que en los últimos 4-5 años, el gobierno se ha excedido en más del cien por ciento. Ese es un rubro importante. Adicionalmente al bono catastrófico que ya está asegurado con el Banco Mundial, que anda en alrededor de seis mil millones de pesos, más los 11 mil millones de pesos que trae etiquetados para 2018 el Fondo de Desastres Naturales (Fonden). Obviamente que, igual, 11 mil millones de pesos serán absolutamente insuficientes”.

Entonces, aseveró, el ejercicio tiene que empezar a hacerse por ahí, explorarse y tener una bolsa lo más grande posible, que puede -de entrada, en un primer ejercicio- andar por lo menos, en alrededor de los 45 a 50 mil millones de pesos. Y la responsabilidad va a ser, efectivamente, de las y los diputados; pero ya sabemos que si el PRI y sus aliados se oponen a una cirugía mayor al Presupuesto de Egresos, esto no va a pasar; pero apelo a que haya sensibilidad y responsabilidad de los grupos parlamentarios para que hagamos un ejercicio en esta perspectiva estando todavía a la espera de que se cuantifique la dimensión, el tamaño, el monto de lo que significaron las pérdidas materiales: Casas, edificios-habitación, etcétera.

El legislador hizo notar que -paralelamente al proceso de configuración de este Fondo Especial para la Reconstrucción- debe haber reformas legales; entre ellas lo relacionado con la reforma a la Ley General de los Partidos Políticos para revisar lo de los financiamientos públicos a dichos institutos. También, indicó, deben verse y reformarse las normas que ayuden a la conformación de este Fondo Especial.

Zambrano indicó finalmente que no se puede dejar de lado ni se debe olvidar el dictamen pendiente para evitar el pase automático del Procurador General de la República a Fiscal General. Expuso que se debe lograr que el “Fiscal anticorrupción” tenga una verdadera autonomía y atender la demanda de la sociedad mexicana para que no se permita más corrupción ni el manejo ilegal de los recursos de la nación.