Autor Arnulfo Roque Huerta
Al iniciar el año la mayoría de las personas se fijan un propósito con el fin de llevarlo a cabo durante los siguientes doce meses; dichos planes pueden ser el bajar de peso, viajar, ser mejor persona, ser más positivo, conocer personas nuevas, interesarse más por la familia y un largo etcétera, pero honestamente son pocos los que logran conseguir sus metas pues la gran mayoría las olvida en el primer mes al darse cuenta que solo se las autoimpusieron por emoción y no por convicción.
La idea no es para nada mala pero es necesario precisar propósitos que estén dentro de lo posible y que no representen un sacrificio enorme el realizarlos, que puedan ser medibles, alcanzables y progresivos; así mismo se tienen que establecer una meta que genere beneficios permanentes. ¿Cuántos no pensamos al iniciar el año ser mejores estudiantes? Pues a continuación enlisto algunos consejos que pueden ser de utilidad a los educandos que deseen mejorar sus calificaciones y hábitos de estudio como parte de sus propósitos para este 2018 que comienza:
Leer: Siempre es importante habituarse a la lectura pues siendo estudiante de cualquier área es imposible no enfrentarse a los distintos tipos de texto, por lo que proponerse leer cuando menos cinco libros en el año que comienza podría ser muy benéfico y cultural; es importante recomendar que busquen el género de su preferencia así como los que aborden temáticas relacionadas a la carrera que estudian o piensan estudiar.
Establecer un horario de estudio en casa: Es bien sabido que un gran porcentaje de jóvenes estudiantes se conforman con lo que alcancen a entender en la escuela dejando de lado cualquier tipo de repaso en casa; esto los lleva a que un día antes o el mismo día de algún examen busquen erróneamente memorizar conceptos claves que les ayude a alcanzar la mínima aprobatoria; siendo éste un mal hábito y muy común se podría contrarrestar si se toman cuando menos treinta minutos al día para repasar los temas vistos durante la jornada.
No faltar a clases: Este debe ser uno de los propósitos principales ya que en ocasiones a los alumnos se les hace muy fácil faltar sin tomar en cuenta que al perder un día se desaprovecha el tema de cada una de las materias que correspondan; claro que pueden surgir imprevistos en los que nada se puede hacer y la falta es inevitable pero quitando eso no existe motivo alguno para ausentarse de clases y mucho menos de forma cotidiana.
Mejorar el promedio: Cuando se espera pasar a un nivel mayor es indispensable contar con un buen promedio el cual sin duda alguna podrá posicionarlos en la escuela y/o carrera deseada; este propósito lleva implícito dejar de lado la mediocridad y el conformismo para aplicarse en la labor que desempeñan la cual con verdad y honestidad es de las más sencillas que podrán realizar a lo largo de su vida.
Encontrar un propósito para su vida: Vivir por vivir, andar por la vida esperando que las cosas pasen, son condiciones en las que vaga el joven moderno, creyendo que el tiempo no avanza y que las cosas llegaran a ellos sin esfuerzo; Sin dudarlo el principal propósito para este año que comienza es encontrar un propósito, un por qué de la vida, un camino a seguir, una meta personal por cumplir, la seguridad de una buena y mejor vida, un futuro real y la certeza de ser, saber y hacer.
Uno de mis propósitos es ayudar a mis alumnos a que logren los suyos, siendo ejemplo de lo que les recomiendo, leyendo cada vez más, estudiando en un horario establecido para poder llevarles una enseñanza de calidad que les sea útil y provechosa, no faltando a clases para cumplir con los planes y programas en tiempo y forma, ser una herramienta para que puedan conseguir un buen promedio y por qué no guiarlos en el camino por encontrar el sentido de la vida.
Cierro con una frase de mi autoría:
“Cada persona tiene un camino, en el camino un propósito y en el propósito la vida misma”.
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