Por: MUGS Redacción

El coordinador del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC) en la ALDF, Armando López Campa, consideró que la desindexación del salario mínimo constituye el primer paso, de muchos más que se tienen que dar de manera sostenida, para que en un plazo no mayor de 10 años, el país transite hacia una situación mucho más sana para recuperar el valor adquisitivo en el salario de los trabajadores.

Celebró que el Senado de la República aprobara por unanimidad la reforma constitucional que permitirá la desindexación del salario mínimo mediante la creación de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), a fin de que el salario mínimo ya no sea utilizado como indicador, unidad, base, medida o referencia para fines ajenos a su naturaleza, y que en noviembre próximo la Cámara de Diputados proceda a su análisis y aprobación.

“Tenemos la certeza de que esto vendrá a redundar necesariamente en mejoras para la clase trabajadora del país, la cual ha sufrido los estragos de una vinculación absurda e injusta, que la mantuvo arrinconada sin poder recuperar lo que corresponde al valor de su trabajo”, indicó.

Aseguró que el aval de los senadores confirmó que el salario mínimo actual es una verdadera aberración porque nadie puede sobrevivir con dignidad con $68.28 pesos diarios, “hoy no sólo se reconoce esto sino que el Senado sigue la tendencia obligada para que en México deje de existir tanta inequidad, pobreza e injusticia”.

Al respecto, sostuvo que “para alguien con un salario mínimo es muy difícil mantener la educación de una persona, ya no se diga de dos o más hijos y menos para solventar sus necesidades mínimas materiales, sociales y culturales”.

“La aprobación de la iniciativa confirmó que no había ningún motivo para que se siguiera retrasando la desvinculación del salario mínimo, y que solamente fueron cortinas de humo las que tendieron aquellos que decían que de aprobarse la desindexación generaría devaluaciones y conflictos en la economía nacional, esa fue una gran mentira”.

Además señaló que no habría nada que discutir si en México ninguna familia viviera del salario mínimo, “pero resulta que nuestro país es el único de la región donde el valor del minisalario es inferior al umbral de la pobreza per cápita”, puntualizó.