Por: Blanca Barrios 

· La visión progresista del GDF ha contenido la pobreza extrema en un 31.3 %, en tanto que la pobreza a nivel nacional creció a 53.6 %

· Homologación de padrones no contribuirá en nada a la solución de la problemática social que agobia no sólo al DF sino al país

· Programas implementados por el gobierno Federal son una farsa para quienes los debieran recibir

Entregar los padrones de programas sociales capitalinos al gobierno Federal es poner en riesgo la política social progresista que tanto han costado a la ciudadanía y que tanto han imitado los tecnócratas del PRI, aseguró el diputado de Movimiento Ciudadano, Óscar Moguel Ballado.

Aseguró que la izquierda tiene como eje rector y como punto de partida a la ciudadanía y los gobiernos tecnócratas sólo ven la rentabilidad electoral y el mejor ejemplo de su fallida política social con las cruzadas contra la pobreza y el hambre que simplemente fracasaron porque se incrementó la pobreza hasta un 53.6, que alcanzó a casi la mitad del país, afirmó.

Aseguró que las cruzadas nacionales no bajaron los índices de marginación, en realidad hicieron ganar al PRI, de ahí los extremos cuidados que deben tener las autoridades del Gobierno del Distrito Federal (GDF) en el cruce de información local con la Federal.

Sostuvo que la base del fracaso Federal es la corrupción que disfraza programas sociales para la compra de conciencias.

Consideró que la entrega de padrones fue un desatino bajo la circunstancia que sea en virtud de que el gobierno Federal ha fallado en su lucha contra la marginación y la pobreza. La Cruzada Nacional Contra el Hambre, aseveró, es un verdadero fracaso.

En contra parte, aseguró que gracias a la visión progresista en la ciudad de México se ha contenido la pobreza extrema en un 31.3 por ciento, en tanto que la pobreza a nivel nacional creció al 53.6 por ciento.

Sin duda, afirmó, la motivación de homologar los padrones de ciudadanos capitalinos con los que ostenta la SEDESOL abrirá la puerta para que se desvirtúe el sentido de las políticas sociales establecidas por los gobiernos de izquierda, que son las que realmente han beneficiado a la población de la ciudad de México y no los programas federales.

En su lucha contra la pobreza y su Cruzada Nacional Contra el Hambre finalmente el gobierno Federal no ha acreditado los beneficios sociales para los que fueron creados esos programas.

Moguel Ballado señaló que en muchos casos, “los programas que ha implementado el gobierno Federal son una farsa para quienes los debieran recibir, al no entregar con oportunidad los apoyos económicos o escatimándoselos por meses”.

Aseguró que desde el siglo pasado ha empeorado la distribución del ingreso en el país “lo que reconfirma la eterna incapacidad de los gobiernos del PRI y del PAN para construir una economía más dinámica e incluyente y una política pública de desarrollo social eficaz para abatir la marginación”.

Consideró que detrás de la homologación de los padrones de beneficiarios de programas sociales, además, se esconde un virtual recorte al gasto social porque el erario nacional no cuenta con los recursos necesarios para atender las demandas de casi medio país.