Por: Redacción

Durante el foro “La situación del campo y presupuesto 2017; propuestas y alternativas”, diputados refrendaron su compromiso para dotar de mayores recursos al agro mexicano, en especial a pequeños productores, así como generar propuestas que impulsen su desarrollo.

En tanto, representantes de movimientos agrarios, académicos y expertos en la materia expresaron que de no apoyar al campo se generarán mayores riesgos en su patrimonio y fuentes de trabajo; además, la falta de oportunidades, principalmente en los jóvenes, permite condiciones propicias para que la delincuencia organizada avance, advirtieron.

Al inaugurar el evento, el presidente de la Comisión de Reforma Agraria, Jesús Serrano Lora (Morena), destacó que la población exige actuar con responsabilidad, compromiso social, honestidad y eficacia; para lograrlo, “los servidores públicos debemos transparentar nuestra actuación y rendir cuentas”.

El legislador se pronunció por incrementar los recursos a organismos de impartición de justicia agraria, ya que no alcanzan ni medianamente a continuar su labor. Tal es el caso de los tribunales agrarios, la Procuraduría Agraria, el Registro Agrario Nacional o el Programa de Resolución de Conflictos Agrarios.

Destacó que para el ejercicio fiscal del 2016 se les otorgó poco más de tres mil 87 millones de pesos, y para 2017 el Ejecutivo federal decidió que estas dependencias sufrieran mayores recortes.

Para lograr incrementos a estos organismos del campo, propuso reducir el gasto a la administración pública federal, desde el Ejecutivo hasta jueces, magistrados, ministros, senadores y diputados. No sólo ayudaría a estas instituciones, sino también a los programas sociales, afirmó.

La diputada Karina Barón Ortiz (PRD), presidenta de la Comisión Especial de Seguimiento al Programa Especial Concurrente (PEC), llamó a la unidad de los diputados de todas las fracciones parlamentarias, para que den su máximo esfuerzo, a fin de lograr un presupuesto digno y suficiente para el campo mexicano en el 2017.

En su mensaje de bienvenida, sostuvo que “el campo mexicano pide hoy que lo defendamos, necesita aliados; sólo así se garantizará su productividad y podrá superar el rezago y la pobreza”.

Urgió a redireccionar los recursos presupuestales a este sector y colocarlo en las prioridades nacionales, ya que “es el que da de comer a todos los mexicanos”.

Manifestó que “los legisladores tenemos que pelear por los que menos tienen, por los de abajo, ya que son los que dan de comer al país; por los pequeños y medianos productores”. Sostuvo que “el aliado de los monopolios y de los grandes empresarios, que se llevan la mayor parte del presupuesto de la Sagarpa, es el gobierno federal”.

Hoy, a los diputados “nos toca unirnos y dar la cara, porque debemos tener como causa principal atender al campo y resolver su problemática”, apuntó.

“Todos, desde nuestra trinchera, tenemos que hacer nuestro máximo esfuerzo y reconocer que este sector le da la soberanía alimentaria al país, que cada vez se pierde más, y requiere reforzarse”, explicó.

A todos los ciudadanos debe interesarles el agro, porque es el equivalente a la salud y a la vida, y con él tenemos todo. “Démosle esa importancia al campo”, convocó.

El diputado del PVEM, Jorge Álvarez López, secretario de la Comisión de Asuntos Indígenas, expresó su preocupación por la situación que atraviesa el campo nacional y la reducción presupuestaria que se propone para el próximo año. Se le debe invertir para beneficio colectivo, sin ver colores partidistas, aseveró.

Llamó a sus homólogos no considerar al agro con fines políticos, sino a un sector marginado y con grandes desigualdades que exige la unidad de todos, porque “está olvidado y a los verdaderos campesinos sólo le dan migajas en el presupuesto”. Sólo mediante la unidad se podrá superar la exclusión.

“El día de hoy no venimos a escuchar discursos en este foro, sino a que juntos analicemos la situación del campo nacional, con el propósito de discutir e identificar las alternativas presupuestales en apoyo de los pequeños y medianos productores”, aseguró al referirse al objetivo de este encuentro.

Estimó que el presupuesto de 2017 para el agro está reducido, como si el campo no fuera el sector que mantiene al país. La inmensa mayoría del gasto federal se destina a las grandes empresas agroindustriales y para los que más tienen, quienes no dejan sus utilidades aquí, mientras a los campesinos sólo se les dan migajas.

No debemos olvidar a este sector e invertirle recursos suficientes; México no debe depender de otros países para garantizar los alimentos que se requieren, puede ser autosuficiente. “No permitamos que nos den migajas, debemos exigir que los productores agrarios no estén excluidos de los recursos públicos”.

La unidad en torno al campo debe ser permanente, y no sólo en la época en que se negocia el Presupuesto de Egresos, y se le quitan recursos, señaló.

Del Comité Permanente de Control y Seguimiento (Copecose), Carlos Martínez Andrade, detalló que 10 por ciento de programas federales no cuentan con un seguimiento puntual de su gasto debido a que no tienen elementos de evaluación; “la misma Sagarpa, a pesar de que tiene evaluaciones externas no reporta en qué medidas se mejoró la situación alimentaria, el desarrollo de capacidades o el ingreso de los productores beneficiarios”.

Los bajos ingresos que recibe el campo benefician a pocas personas, lo que genera riesgos al patrimonio familiar, a las escasas fuentes de trabajo, así como baja competitividad y productividad, dijo.

Agregó que acuerdos como el Transpacífico de Cooperación Económica sólo empeorará la situación del agro.

Del “Movimiento Campesino el Campo es de Todos”, Luis Gómez Garay, destacó que la falta de desarrollo del campo se traduce en la explosión de la criminalidad. La falta de oportunidades, abundó, genera condiciones propicias para que la delincuencia organizada avance, sobre todo en perjuicio de los más jóvenes. “Muchos de los que vivimos en el campo no podemos vivir en nuestras comunidades por el acoso del crimen organizado”, enfatizó.

Hizo un llamado para que la situación cambie, pero “no a través de una política policiaca de Estado, sino a partir de mejorar las condiciones de desarrollo para un campo próspero con oportunidades de empleo y desarrollo para los jóvenes”.

Se requiere abrir más espacios de discusión y diálogo para que “la población comprenda que hoy en día el campo se encuentra en una situación lamentable de pobreza y marginación extrema, así como de desgaste social”.

El rector de la Universidad Autónoma Chapingo, José Sergio Barrales Domínguez, subrayó que el país cuenta con una riqueza extraordinaria para la alimentación, por lo que se debe pensar en ser productivos y aumentar el presupuesto para el campo, reorientar el recurso a la producción y canalizarlo a cuestiones prioritarias.

Solicitó a los legisladores que el amaranto se considere como cultivo prioritario en la Ley de Desarrollo Rural, ya que es una planta extraordinaria con valor nutricional, con la cual se puede elaborar comida y contribuir a la generación de empleos.

José Dolores Barrios, representante de “Movimiento Campesino el Campo es de Todos”, solicitó definir un presupuesto alternativo enfocado al pequeño productor, porque la mayoría de los recursos se entrega a grandes empresas mexicanas y a transnacionales.

Pidió destinar 2 mil 800 millones de pesos al programa de apoyo a la mujer y no pretender eliminarlo. La propuesta registra cero pesos.

Demandó restituir el proyecto de vivienda rural que ha funcionado, aunque “se ha corrompido”, porque la construcción de cuartos se realizaba con 20 mil pesos, ahora con los “cuartos rosas” se reporta un gasto de 50 mil pesos.

Propuso crear cuatro fondos para la compra de tierras por parte de campesinos de mayor edad; un sistema de comercialización para adquirir alimentos producidos por los pequeños productores; desarrollo tecnológico e innovación rural, y programas de atención a pueblos indígenas.

Luis Cruz Nieva, investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria (CEDRSSA) de la Cámara de Diputados, destacó la importancia de darle mejor y mayor calidad al gasto federal con el fomento al desarrollo, a través de inversión en infraestructura y mayor competitividad, rubros que registran reducción de recursos.

Sostuvo que la Sagarpa desplegará en 2017 una estrategia para contribuir a eliminar el hambre mediante la comercialización de la producción de alimentos realizada por pequeños productores. Es decir, se asegura el autoconsumo y el excedente lo podrán vender, lo cual fortalecerá la capacidad productiva de ese sector.